"Tenemos que racionar las compresas y los tampones. Alguna vez he usado toallas"

Ana Escrivá saluda por su nombre a cada una de las mujeres que van llegando a la sede de la asociación de vecinos Nuevas Palomeras. El último martes de mes pueden pasar por aquí hasta 80 mujeres, 80 historias que Ana conoce bien. Algunas llevan viniendo desde hace año y medio, desde que se abrió esta despensa; otras desde hace tan solo unos meses. Adolescentes, de mediana edad, incluso abuelas con nietas a su cargo, todas tienen algo en común: no pueden costearse productos de primera necesidad tan caros como compresas, tampones o salvaslips. Y en este local del madrileño distrito de Vallecas, la ONG Somos Mujeres se los proporcionan de forma gratuita.