Anne Hathaway hace un guiño a 'El diablo viste de Prada' en un evento con Anna Wintour

En la película trabajaba a las órdenes de un álter ego de Wintour encarnado por Meryl Streep.
Fotograma de 'El diablo viste de Prada'
Fotograma de 'El diablo viste de Prada'
Fotograma de 'El diablo viste de Prada'

En 2006, Anne Hathaway entró a trabajar en Vogue. Es decir, de forma figurada: ocurría en la exitosísima comedia El diablo viste de Prada y Hathaway interpretaba a Andy Sachs, periodista que nunca le había dado demasiada importancia a la moda antes de ponerse bajo las órdenes de la despótica Miranda Priestly, interpretada por Meryl Streep en uno de los highlights de su carrera. La revista, por lo demás, se llamaba Runway, pero el film de David Frankel no engañaba a nadie: el diseño de la oficina era idéntico al de la redacción de Vogue, y resultaba imposible no relacionar a Miranda con Anna Wintour, editora de esta longeva revista.

Para colmo de coincidencias, El diablo viste de Prada se basaba en las memorias de Lauren Weisberger, exempleada de Vogue, y la misma Weisberger apuntó que “había muchas cosas que se acercaban a la realidad”. El vínculo entre El diablo viste de Prada, Vogue y Wintour está, pues, más que asentado, y de ahí que estén causando tanto furor unas imágenes que recoge Entertainment Weekly. En ella vemos a Anne Hathaway asistiendo al desfile de Michael Kors en la Semana de la Moda de Nueva York, y no lo hace sola. En una foto aparece nada menos que junto a Anna Wintour, y lo más llamativo de todo es la indumentaria que porta la actriz ganadora del Oscar por Los miserables.

Anne Hathaway junto a Anne Wintour (y su indumentaria en 'El diablo viste de Prada'
Anne Hathaway junto a Anne Wintour (y su indumentaria en 'El diablo viste de Prada'
Entertainment Weekly

Hathaway lleva una chaqueta marrón sobre jersey de cuello alto, además de un flequillo cubriéndole la frente. Su aspecto recuerda mucho al de Andy Sachs en las escenas finales de El diablo viste de Prada, de forma que es inevitable asumir que Hathaway ha querido hacerle un guiño al film. Que haya alternado con Wintour implica que no hay ningún rencor entre ellas por cómo El diablo viste de Prada parodió la imagen de Vogue y de su cabecilla, aunque Wintour ya ha dado muestras en el pasado de que no quedó muy contenta con el retrato que Streep hizo de ella.

Sin ir más lejos, al poco de que El diablo viste de Prada se estrenara, Frankel y Wintour coincidieron entre la audiencia de un partido de tenis, y Frankel ha explicado en varias ocasiones cómo la periodista se negó a saludarle. Parece que el enfado de Wintour se aplica al director de la película, pero no tanto a la actriz que personificó la presión de su mando.

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