A poca gente de Hollywood le gusta tanto el western como a Kevin Costner. Es lo que explica que, más allá de lo que haya podido hacer como actor, Costner haya aprovechado cada oportunidad de ponerse detrás de las cámaras para poner en pie westerns grandes y épicos. De Bailando con lobos pasando a la excéntrica (y fracasada) Mensajero del futuro), y luego Open Range y finalmente Horizon: An American Saga, que acaba de estrenar en cines. Se trata de la primera de cuatro películas programadas, donde Costner recorre varios años de la colonización del Oeste reservándose un papel en medio de un nutrido reparto.
Horizon estrenará su segundo capítulo en agosto a la espera de producir los otros dos (con un presupuesto desmedido que sale en gran parte del bolsillo de Costner), y ahora mismo el director está vendiendo sus bondades por varios medios. Invitado al podcast Happy Sad Confused, Costner ha abordado sin ambages el público objetivo del western o, más bien, el público al que se dirige él.
“Hago películas para hombres. Eso es lo que hago”, admitió el protagonista de El guardaespaldas. Aún así, asegura haberse esforzado en que el guion de Horizon que ha escrito junto a Jon Baird tenga buenos personajes femeninos. “Las mujeres lideran la historia en cada línea argumental”, prosigue Costner.
En el elenco de Horizon vemos a Sienna Miller, Jenna Malone o Abbey Lee con personajes importantes. “No podía concebir una escena donde no interviniera una mujer”, insiste Costner. “No haré una película a menos que tenga personajes femeninos fuertes. Así es como he llevado mi carrera. Creo que por eso tengo muchos seguidores. Les agradezco a las mujeres que traigan a sus hombres. Después de todo, es un western. Simplemente no puedo concebir una película sin mujeres fuertes”.
Estas declaraciones complementan otras recientes donde repasaba el valor histórico de la mujer en las historias que suele contar el western, y qué aporta Horizon. “Ellas desempeñaron un papel muy importante en el Oeste y en lo que ocurrió. A menudo las llevaron allí contra su voluntad y con sus hijos con la idea de que había algo grande ahí fuera. No había nada, salvo un grupo de personas que vivieron allí durante miles de años. Las mujeres fueron arrastradas a las circunstancias más terribles e hicieron que funcionara. Aún así no suelen aparecer en las películas del Oeste, pero en Horizon tienen una presencia dominante”.
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