El pasado jueves falleció a los 80 años Martin Mull. No solo fue actor y humorista, sino que también cultivó la música y la pintura. Se hizo eco su hija la guionista Maggie Mull, según recogen medios como IndieWire. “Me rompe el corazón compartir que mi padre falleció en casa el 27 de junio, después de una valiente lucha contra una larga enfermedad. Era conocido por destacar en todas las disciplinas creativas imaginables (...) Nunca dejaba de ser gracioso. Mi padre será profundamente añorado por su mujer y su hija, por sus amigos y compañeros de trabajo, por sus colegas artistas y cómicos y músicos, y (señal de una persona verdaderamente excepcional) por muchos, muchos perros”.
“Yo le quería muchísimo”, concluía el comunicado. Nacido en Chicago, Mull estudió pintura en la universidad para dedicarse a la composición y finalmente a la comedia musical, teloneando durante los años 70 a artistas como Randy Newman, Billy Joel o Frank Zappa. Dio el salto a la actuación a mediados de la década en Mary Hartman, Mary Hartman, sitcom que dio pie a dos spin-offs muy peculiares que le mantuvieron en el reparto. Fernwood 2 Night y America 2 Night, creadas por Norman Lear, eran ambas sátiras de los talk shows, que allanaron el camino para que en 1985 HBO le produjera un falso documental con su protagonismo, Martin Mull Presents the History of White People in America.
Para entonces Mull ya era muy conocido y empezó a acumular apariciones en sitcoms como Roseanne, Las chicas de oro, Ellen y su mundo o Sabrina, cosas de brujas. Dentro del cine interpretó al Coronel Mustard para El juego de la sospecha de 1985, adaptación del Cluedo, y dos años después fue el protagonista de la comedia Labios de alquiler, dirigida por Robert Downey Sr. (esto es, el padre de Robert Downey Jr.) También intervino en Un padre en apuros y Niño rico 2 durante los 90, siendo uno de sus últimos trabajos para el cine Un gesto estúpido e inútil de 2018, centrado en la creación de la revista National Lampoon.
El papel más conocido de Mull quizá fuera, sin embargo, el del recurrente Gene Parmesan dentro de la serie de los 2000 Arrested Development. Durante su carrera audiovisual, por otra parte, Mull nunca dejó de pintar. Combinó el arte pop con el collage y la pintura fotorrealista, y un cuadro suyo llegó a servir de portada para una novela de Joyce Carol Oates, Hermana mía, mi amor.
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