Muere Robert Blake, el actor de 'Carretera perdida' acusado de asesinar a su mujer

Este jueves falleció Robert Blake a los 89 años en su casa de Los Ángeles, luego de una larga batalla contra una enfermedad cardiovascular. Así se lo ha revelado su sobrina, Noreen Austin, a medios como The Hollywood Reporter. Luego de una carrera que abarcaba casi seis décadas, Blake se retiró de la actuación al poco de obtener su papel más icónico: el del Hombre Misterioso en Carretera perdida de David Lynch.

Pero su retirada del cine no implicó una salida de la vida pública. En 2001, poco después de Carretera perdida, su segunda esposa Bonny Lee Bakley apareció muerta a la salida de un restaurante de Los Ángeles. Blake quedó como el principal sospechoso y le acusaron de varios cargos de asesinato. El juicio de Blake por el asesinato de su mujer fue muy publicitado y se desarrolló durante tres meses, al final de los cuales Blake fue absuelto.

Poco después, sin embargo, los hijos de Bakley presentaron otra demanda contra Blake. Un jurado declaró a Blake culpable y el actor tuvo que pagarle 30 millones de dólares a la familia, lo que sumado a costes del juicio previo le dejó en bancarrota. Antes de esta crisis, Blake había empezado a trabajar en Hollywood desde la infancia, siendo uno de los pocos niños actores que mantuvieron el éxito al pasar a la adultez.

A finales de los 30 Blake ya trabajaba en producciones de muy variado pelaje, sufriendo en casa malos tratos a manos de su familia. En 1947 fue visto como un joven vendedor de lotería dentro de El tesoro de Sierra Madre, y justo veinte años después se consagró con A sangre fría. En esta adaptación de Truman Capote que dirigió Richard Brooks, Blake interpretó a Perry, uno de los asesinos.

Más tarde, en el 75, Blake interpretó a Tony Baretta en la serie policíaca Baretta, que le dio dos nominaciones al Emmy y una victoria. Luego de finalizar su carrera como actor aterrorizando a Bill Pullman en Carretera perdida, Blake volvió brevemente a los focos en 2019 para hablar de lo ocurrido con su mujer muerta y el juicio mediático.

Más tarde Quentin Tarantino le dedicó su novela Érase una vez en Hollywood, una vez muchos habían percibido en el personaje de Cliff Booth (interpretado por Brad Pitt para el cine, y también sospechoso del asesinato de su mujer) una gran inspiración en Blake. 

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