La película que mejor predijo Sagitario A*, el agujero negro del centro de nuestra galaxia

'Interstellar' hizo un buen trabajo de aproximación, pero Claire Denis superó a Christopher Nolan con su viaje espacial.
High Life
High Life
Cinemanía
High Life

La noticia que ha dado hoy el equipo internacional del Telescopio Horizonte de Sucesos (EHT) en Múnich, con la primera imagen del agujero negro Sagitario A*, ubicado en el centro de la Vía Láctea, es de las que llenan de emoción y sobrecogimiento. 

Sin embargo, cuando este mismo equipo de científicos presentó hace tres años la primera imagen tomada de un agujero negro (en la lejana galaxia Messier 87), ya pudimos comprobar que el cine especulativo había raspado un poco la primicia de la realidad.

Los espectadores de Interstellar (2014) corrieron a señalar las similitudes entre esa primera imagen real de un agujero negro y lo mostrado en la película de Christopher Nolan, que desde su estreno se ha convertido en uno de los referentes más citados de la ciencia-ficción espacial dada su fidelidad a la ciencia conocida dentro de las libertades que se pueden tomar el crear una obra de ficción. 

Por algo Interstellar contó con el astrofísico Kip Thorne como principal consultor científico, tomando inspiración directamente de su trabajo. No obstante, después llegó otra película más reciente que se acercó incluso más a la representación de un agujero negro: High Life (2018), dirigida por Claire Denis.

La cineasta francesa ganó el premio FIPRESCI de la crítica en el Festival de San Sebastián con esta epopeya espacial, íntima y sexual protagonizada por Robert Pattinson, Juliette Binoche, Mia Goth y el rapero André 3000, entre otros. En ella, un grupo de delincuentes juveniles cambian su condena de prisión por embarcarse en un viaje espacial de destino incierto hacia el agujero negro más cercano a la Tierra.

Agujeros negros como dos gotas de agua

La nave en la que se desplazan por el cosmos, diseñada por el danés Olafur Eliasson, es como una gran cárcel laboratorio flotante, donde realizan una variedad de experimentos sobre la reproducción. Tras diversas vicisitudes y visitas a una máquina de orgasmos, en el clímax del filme hace acto de aparición un enorme agujero negro muy similar a M87, aunque fue creado para el filme un año antes de que este último fuera retratado. 

La propia Denis comentó la noticia en una entrevista, y cómo tras la publicación de la imagen no paró de recibir de mensajes y llamadas diciéndole lo parecidos que eran ambos agujeros negros. Una comparación con lo que hemos podido ver de nuestro 'cercano' Sagitario A* también deja clara la similitud. 

Sagitario A* / 'High Life'
Sagitario A* / 'High Life'
Cinemanía

Hay un claro precedente al agujero negro de High Life en la propia obra de Denis: el cortometraje abstracto Contact (2014), una colaboración previa entre la directora y Eliasson para una instalación del danés en la Fundación Louis Vuitton de París. Una línea de luz que crece sobre un vacío tenebroso, no muy diferente a lo que acabó siendo la representación del agujero negro que llevó a cabo la compañía de efectos especiales BUF en la película.

Cómo se crea un agujero negro

Del mismo modo que Nolan contó con Thorne como guía y referente, en High Life el puesto de consultor científico (o, mejor aún, "compañero cósmico", tal y como lo identifican los títulos de crédito), fue el astrofísico francés Aurélien Barrau, un experto en el campo de los agujeros negros que también ha destacado en el terreno de la filosofía como discípulo de Jean-Luc Nancy; pensador que siempre ha ocupado un lugar importante en la obra de Denis.

Barrau quita con mesura científica cierta magnitud de asombro a la coincidencia entre el aspecto de los agujeros negro de la ficción con los reales que ahora podemos ver en imágenes. En una entrevista para Inverse, explicaba que no debería ser una sorpresa porque por eso mismo se habían esmerado en crear un agujero negro realista sin excederse con las licencias artísticas en la representación.

"Aunque no tuviéramos ninguna foto, hace cinco o incluso más de diez años ya estábamos plenamente capacitados para calcular el aspecto que podría tener un agujero negro", asegura Barrau. "Al hacer una película cuentas con un mapa de las estrellas y, con la ecuación de la relatividad general, no es difícil calcular cómo lo distorsionaría un agujero negro".

Mia Goth en 'High Life'
Mia Goth en 'High Life'
Cinemanía

También fue delicado imaginar lo que le sucedería a quien se adentrara en un agujero negro, como ocurre en High Life. El personaje de Mia Goth sufre ese horror desde el interior de una cápsula que acaba penetrando en el agujero negro: su cuerpo se estira y descompone hasta reventar en pedazos. 

Este efecto de los cambios extremos en un campo gravitatorio no homogéneo es lo que en astrofísica se conoce con un término tan visual como 'espaguetización', que en la película también intentó reproducirse de la manera más fidedigna (y espeluznante posible). Solo que, en este caso, esperamos no tener la oportunidad de comprobar lo acertada o no que fue la representación.

¿Quieres recibir todos los viernes en tu correo las mejores recomendaciones de cine y series? Apúntate a nuestra newsletter.

Coordinador web 'Cinemanía'

Crítico de cine que ve demasiadas series, licenciado en Periodismo y posgraduado en Semiótica en la Universidad Complutense de Madrid; cayó en una marmita de Nouvelle Vague cuando era pequeño y lleva mucho tiempo acostándose tarde en festivales de cine.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento