Un día, en el campo, Stephen King estuvo a punto de perder a su hijo. El que más tarde crecería para convertirse en el también escritor Owen King se soltó de la mano de su padre y salió corriendo a toda velocidad hacia la carretera. El novelista fue capaz de reponerse a la conmoción y alcanzó a su hijo antes de que pisase el asfalto, cuya trepidación revelaba la cercanía de un vehículo. Aquella mañana, Stephen King fue consciente de dos cosas: que un padre no puede permitirse ni un minuto de relajación, y que tenía entre manos la premisa de una novela. Esta se publicó poco después bajo el título de Cementerio de animales.
Los lectores de este libro, uno de los mejores del autor, reconocerán el episodio real que luego King plasmaría en Cementerio de animales. Para el novelista de Maine, esta es su novela más aterradora, y el cine ha tomado buena nota de ello, ya que se han hecho hasta cuatro adaptaciones de Cementerio de animales. La primera vez que se llevó a la pantalla grande fue en 1989, menos de una década después de que se publicase la novela, y con el título en España de Cementerio viviente. King se encargó de su guion, lo que se tradujo en una fidelidad mayor a la de la versión de 2019, y en el mantenimiento de una escena que los productores querían eliminar.
¿Por qué escena peleó Stephen King?
Sin entrar en detalles para no destripárselos a los que no hayan leído o visto ninguna de las versiones de Cementerio de animales, hay escenas peores que esta. Las hay más terroríficas, más truculentas y más trágicas. Pero ninguna tan grotesca y patética como aquella en la que, durante el funeral del pequeño Gage, su padre es abofeteado por su suegro y, al caer, derriba el ataúd de su hijo. El féretro se abre y deja ver a los presentes el cuerpo destrozado y mutilado del niño.
Mary Lambert, la directora de Cementerio viviente, quería esta escena en su película, pero estaba en franca minoría. Sin embargo, su único aliado era, también, el más importante: Stephen King la respaldaba. “Todas las personas que trabajaron conmigo querían eliminar esa escena porque creían que era demasiado triste”, ha contado Lambert. “Stephen fue un gran apoyo en el momento al decir que no porque la escena contenía elementos importantes”.
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