Warner admite que podía haberlo hecho mejor cuando anunció su modelo híbrido con HBO Max

El pasado diciembre finalmente estalló la bomba. La crisis del coronavirus había sumido a Hollywood en el caos, a través de la clausura de cines, la suspensión de rodajes y el incesante aplazamiento de estrenos. Todo lo cual había llevado al sector de exhibición a una crisis sin precedentes, que veía además cómo Disney resolvía llevar un gran estreno como Mulan directamente al streaming. Warner no hizo exactamente eso, pero tampoco contribuyó a inyectar mucho oxígeno: a finales de 2020 confirmó que todos sus estrenos del año siguiente pasarían por un modelo híbrido entre HBO Max, su recién inaugurado servicio de streaming, y los cines que pudieran permitírselo.

“Acaban de matar a ‘Dune’”: Denis Villeneuve también arremete contra Warner

Naturalmente, esto causó un gran malestar entre personalidades de la industria, sobre todo en lo referente a cineastas vinculados a la major como Christopher Nolan o Denis Villeneuve. Mientras Nolan llamaba a HBO Max “el peor servicio de streaming”, Villeneuve lamentaba cómo este cambio de planes podría afectar al potencial ‘franquiciable’ de Dune, película sujeta a este modelo y que precisa de una secuela para concluir su historia. Ambos insistían, también, en la grave afrenta que esta decisión había supuesto para los directores afincados en la compañía (ninguno de los cuales fue avisado), y eso es de lo que más se arrepiente ahora Jason Kilar, CEO de WarnerMedia.

Kilar lleva algo menos de un año en el puesto, y su gran prioridad es conseguir que HBO Max se imponga en el disputado mercado del streaming (teóricamente a España llegaría a finales de año). Bajo las presiones de AT&T, conglomerado al que pertenece WarnerMedia, HBO Max necesitaba afianzar su atractivo en plena pandemia, y esta fue la principal razón tras este modelo híbrido, inaugurado por Wonder Woman 1984 y proseguido (con un sorprendente éxito en taquilla) por Godzilla vs. Kong. Entrevistado dentro del podcast Recode perteneciente al medio Vox, Kilar recordaba cómo ¨todo fue muy complicado a principios del pasado diciembre”.

“Si tuviera la oportunidad de volver a hacerlo, creo que es apropiado decir que habríamos esperado un par de días para ver si podíamos tener aún más conversaciones de las que tuvimos”, explica el ejecutivo. Kilar también insiste en que el modelo híbrido durará solo hasta 2022; llegando el nuevo año se volvería al sistema habitual, con Warner negociando ahora mismo un margen de 45 días entre la llegada al cine y el paso a las plataformas. “Creo es que justo decir que una, ya sabes, una gran película de DC… iría exclusivamente a los cines primero y luego a algún lugar como HBO Max”, confirma.

Una vez la major consiguió sortear la demanda de Legendary Entertainment (productora que ha financiado buena parte del presupuesto tanto de Godzilla vs. Kong como de Dune), se dispone a aplicar el modelo a próximos estrenos como El Escuadrón Suicida, Matrix 4 o la propia Dune. En lo que respecta a otra película tan esperada como The Batman, programada para 2022, esta se distribuiría por los canales habituales.