En un aeropuerto es completamente imposible aparcar sin pagar. Lo máximo permitido son los espacios destinados a la subida y bajada de viajeros, pero no es posible estar allí por un tiempo indefinido. Además, aquellos que dejan el coche en un aparcamiento pueden llegar a gastar incluso más de lo que cuesta el vuelo.
Pixabay/Free-PhotosNo es casualidad el lugar en el que se encuentra esta zona comercial. Está justo después de pasar los controles de seguridad y antes de ir a las puertas de embarque. Normalmente, tenemos mucho tiempo libre antes del avión, así que lo normal es echar un vistazo, aumentando el riesgo de comprar algo. Además, en ocasiones hay que atravesar esta zona para llegar hasta el avión.
AENACada vez hay una oferta más variada y selecta en los aeropuertos con el objetivo de atraer a una clientela más amplia. No se puede olvidar además que, por lo general, cualquier producto en estos lugares cuesta mucho más que en el exterior.
Pixabay/Free-PhotosLos aeropuertos cada vez tienden más a incorporar ventanas, con el objetivo de incentivar el consumo. Los expertos señalan que los pasajeros caminan más por los comercios que tienen luz solar y escapan de los que no.
Pixabay/Free-PhotosTras anunciarse la puerta de embarque, el recorrido hasta ella está también lleno de tiendas que invitan a comprar. La razón es que si llegas demasiado pronto hasta tu avión, siempre puedes querer adquirir algo.
Pixabay/SkitterphotoLos pasillos del duty free tienen un diseño curvo con el gran objetivo de favorecer que mires los productos. Normalmente la gente suele mirar más hacia la derecha, así que con esta técnica, tiene una visión global de todo el lugar.
EPLa zona comercial está ya en las entrañas del aeropuerto, lejos del lugar en el que nos hemos despedido de familiares y amigos. Esta soledad que normalmente tenemos en viajes de una o dos personas nos impulsa a ojear las tiendas, aumentando las posibilidades de comprar algo.
Pixabay/JESHOOTS-comOtra idea que tienen algunos aeropuertos es anunciar la puerta de embarque lo más tarde posible. El objetivo es claro, que el consumidor se aburra, visite los comercios y compre.
Pixabay/MichaelGaidaEl objetivo es que te sientas seguro y cómodo y así te puedas centrar en las compras, por lo que el aeropuerto está lleno de pantallas en las que se te dan los detalles del vuelo y el tiempo que tardas hasta tu puerta. La idea es que te quites el estrés y te relajes.
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