La unidad que pudimos probar del Model X fue la más potente que existe en la actualidad: el P1OOD. La P quiere decir performance, el 100 es la capacidad de la batería medida en kW/h y la D se refiere a que tiene un doble motor (Dual Motor). Su longitud es de 5037 mm. La autonomía de la unidad probada con dicho motor eléctrico es de 542 km (NEDC). El precio del Tesla Model X más básico parte de los 103.100
PABLO ALONSO / JESÚS DOMÍNGUEZLa llave del Model X es parecida a la del Model S: una figura de un vehículo con la silueta de un Tesla. Sin embargo, hay una diferencia: donde están ubicadas las puertas en la llave hay dos botones añadidos que sirven para abrir las puertas traseras. Se suman a los botones que ya existen para abrir los dos maleteros.Para abrir la puerta del conductor podemos configurar el vehículo para que nos abra la misma cuando nos aproximamos con la llave. Una vez en el interior, si pisamos el pedal del freno, de forma automática la puerta del conductor se cierra ya que el vehículo entiende que queremos iniciar la marcha. Si no, desde la pantalla central nos ofrece la opción de cerrar todas las puertas al mismo tiempo. Otro elemento curioso en las puertas son las manillas de apertura: al contrario que en la mayoría de los coches, en este modelo es un botón grande que hay que accionar.
PABLO ALONSO / JESÚS DOMÍNGUEZDurante la prueba comprobamos que el retrovisor interior puede resultar insuficiente para tener una buena visibilidad de los coches que tenemos detrás, sobre todo cuando van pasajeros en los asientos traseros. Aunque esta funcionalidad la pueden cubrir en parte los retrovisores del exterior del vehículo, de gran tamaño.También comprobamos que el parabrisas panorámico - según Tesla el más grande del mercado- consigue protegernos del calor del sol si circulamos con él de frente. También nos llamó la atención que el parasol se coloca en mitad del cristal gracias a dos imanes que lo sujetan.
PABLO ALONSO / JESÚS DOMÍNGUEZA las plazas traseras se accede después de que las puertas posteriores se eleven en forma de alas de halcón, tal como Tesla las denomina en su web. Cada puerta tiene seis sensores que permiten su apertura dependiendo de los obstáculos con los que se encuentre. Precisamente, probamos que efectivamente funcionan dichos sensores cuando capta un objeto o una persona, en este caso uno de nosotros se situó en frente de la puerta bloqueando su movimiento.En la prueba, la primera vez la puerta derecha se quedó bloqueada en su apertura: tras captarnos, posteriormente podíamos cerrar la puerta, pero cuando intentamos acceder al vehículo de nuevo la puerta solo se abría hasta el punto en el que se quedó anteriormente cuando nos detectó el Model X. Esto solo nos ocurrió una vez, las demás veces que abrimos y cerramos las puertas funcionaron correctamente. La explicación que nos dio Tesla es que a veces los sensores de las puertas detectan una sombra que puede confundirse con un objeto o cierta ráfaga de viento que puede percibir también como objeto.
PABLO ALONSO / JESÚS DOMÍNGUEZSegún Tesla, es la pantalla táctil más grande fabricada para un coche. Mide 17 pulgadas (unos 43 cm en diagonal). Desde nuestra experiencia, es bastante intuitiva y en pocos minutos te acuerdas de dónde están casi todos los elementos básicos, aunque también es cierto que al ser una pantalla tan grande, al principio cuesta ubicar todos los elementos de forma rápida. Esto hace que nos podamos distraer si vamos al volante. Sin embargo, Tesla nos especifica que la idea es que el conductor siga la pantalla que tiene frente a él -que ofrece una gran calidad de imagen-, tras el volante, y no la pantalla más grande, que debe manipular el copiloto o el conductor cuando no está circulando.Dicha pantalla muestra la información de que el vehículo tiene conexión a Internet, lo que no significa que ofrezca WiFi a los ocupantes. Con esto, es interesante conocer que desde el navegador se pueden consultar todos los puntos de carga puestos por Tesla en las carreteras por si vas a viajar y necesitas conocer dónde cargar tu vehículo. El vehículo, al estar conectado, recibe periódicamente actualizaciones. Según Tesla, "el objetivo de actualizar el coche es mejorar siempre el vehículo. Las actualizaciones pueden ser desde cambios en la climatización, velocidad y comportamiento del coche, cambios en la interfaz de la pantalla…".
PABLO ALONSO / JESÚS DOMÍNGUEZLa unidad del Model X que probamos, la P100D, tenía la actualización del modo Ludicrous Plus. Esto significa que nuestro modelo podía llegar a alcanzar una velocidad todavía más ridícula -traducción de ludicrous- y absurda, dicho con humor. Para ello, los ingenieros de Tesla nos avisan en la pantalla de 17 pulgadas con unas ráfagas (como si fuésemos a la velocidad de la luz en Star Wars) que indican que vamos a poner una configuración extrema del vehículo.
PABLO ALONSO / JESÚS DOMÍNGUEZAntes de decidir que quieres accionar el modo Ludicrous Plus, los ingenieros de Tesla con mucho humor nos plantean la pregunta de la imagen: "¿Estás seguro de que quieres alcanzar los límites? Esto provocará un desgaste acelerado en el motor, la caja de cambios y la batería". A lo que tenemos que responder seleccionando uno de los dos botones en azul o rojo. En azul "No, quiero a mi mamá" y en rojo "Sí, ¡adelante y ponlo en marcha!
PABLO ALONSO / JESÚS DOMÍNGUEZUna de las principales características de este vehículo es la automatización gracias al software que integra Tesla. Una de las opciones más prácticas es la apertura automática tanto de las puertas delanteras, como traseras (apertura en forma de "ala de halcón") y los dos maleteros, tanto el trasero como el delantero -recordamos que en este coche los dos motores eléctricos se ubican entre las ruedas del eje delantero y trasero, en la parte baja del vehículo-.
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