El frigorífico es el único electrodoméstico que nunca descansa. Puede suponer hasta un tercio del consumo eléctrico de la casa. Si el congelador acumula hielo estamos gastando más.
Expertos chocolateros recomiendan una temperatura entre 14 y 20 °C, lejos del calor, la luz y la humedad. El frigorífico altera la textura y las propiedades del chocolate, uno de los ingredientes estrella de decenas de postres veraniegos.
Según los expertos, elegir el envase adecuado, controlar la temperatura y el tiempo son claves para evitar la proliferación bacteriana y prevenir riesgos para la salud al conservar alimentos en el frigorífico. Descubre los problemas de este acto tan cotidiano en las familias de España.
En muchas ocasiones, abrimos una lata para comer o cenar y la guardamos para el día siguiente sin saber lo que esto puede significar para nuestra salud. Estos son algunos de los riesgos para tu organismo que debes conocer.
Aunque está recorriendo las redes sociales, no se trata de una manera segura de limpiar este electrodoméstico ya que puede dañarlo y causar un accidente, tal y como indican los fabricantes.
Este trabajador de una de las cadenas de alimentación más importantes de Reino Unido desvela la verdad de algunos de los consejos más virales que podemos encontrar en esta red social.
Los productos que no almacenamos correctamente acaban tirándose en la mayoría de los casos. Con la proximidad del verano, el desperdicio se hace aún más patente, por lo que hemos preguntado a un experto cómo conservarlo todo en buen estado.
El congelador es un electrodoméstico esencial en las cocinas porque permite conservar cualquier pescado durante meses. Pero cuidado, porque si están mucho tiempo congelados, pierden calidad.
En España hay recetas que no se conciben sin el ajo, como la sopa castellana, el ajoarriero, o el gazpacho. Y para conservarlos, solo se necesita un tarro y aceite de oliva virgen extra.
No es la fruta que más nos gusta (¡tan ácida!), pero es muy versátil y no deben faltar en nuestra cocina. Dejar los limones a temperatura ambiente no es una buena opción si queremos conservarlos.
Hay que encontrar el rastro, la marca de la máquina. Aunque la industria ha perfeccionado su fabricación —y así muchos locales ofrecen falsas croquetas caseras— el proceso deja su huella.
Después de descartar los que estén abiertos, rotos o con un olor desagradable, hay que limpiarlos bien. Es lo más engorroso de hacer mejillones, pero es imprescindible. Basta con limpiar la concha y retirar las barbas.
Comemos salmón fresco (en su mayoría noruego), pero también mucho ahumado, ese que se consigue salándolo y exponiéndolo al humo. Le da un sabor diferente y mayor tiempo de conservación. ¿Y podemos congelarlo?
La congelación es un proceso agresivo que puede dar al traste con el queso. No destruye sus nutrientes, pero afecta a su textura y calidad. Algunos (pocos) quesos pueden congelarse.
Hay que comer más pescado. Es parte importante de nuestra dieta mediterránea y sabemos que su consumo es sano (en general). Claro que hay que saber comprar pescado: elegir el que es fresco y de fiar.
Las bolsas de verduras congeladas —lejos del mito de que así pierden nutrientes— son una muy buena opción en la cesta de la compra; facilitando llevar una dieta rica en vegetales que sea variada, rápida y saludable.
El aguacate es un 'superalimento', aunque tiene una parte negativa; se debe consumir en tres días para que no se estropee. Pero tranquilo, porque te traemos el truco para alargar unos días más la vida útil de tu aguacate.