No dejamos de versar las virtudes de la freidora de aire. Pero es que es de justicia reconocer que es un gran invento. Este electrodoméstico ha demostrado que puede cocinarlo (casi) todo de manera más sana (porque apenas usa grasa) y bastante rápida. En realidad, la freidora de aire hace mucho más que freír: cocina. Y lo hace con aire caliente. Ese es su principio. Pero la pregunta es lícita: ¿de verdad lo cocina todo? Por ejemplo, ¿se puede hacer un huevo en esta freidora? Se puede.
Los huevos son una de las bases de cualquier despensa. Son una gran fuente de proteínas de fácil absorción y contienen también vitaminas, minerales, grasas saludables y antioxidantes. Algunos de los nutrientes esenciales que nos proporcionan son el selenio y las vitaminas B12 y A.
No solo podemos hacer huevos en la freidora de aire, sino que podemos hacerlos de distintas formas. Todo es cuestión de conocer bien las relaciones de temperatura/tiempo de nuestro aparato (sí, cada una es un mundo, como los hornos clásicos), así como tener en cuenta la potencia.
Huevo frito
Necesitamos un poco de aceite y papel vegetal. Precalentamos la freidora 5 minutos a 180º. Ponemos el papel vegetal sobre la base de la cesta. Echamos una gotita de aceite y la esparcimos. Rompemos el huevo y lo colocamos. Un poco de sal y lo dejamos 5 minutos a 200º.
Ya estará, pero para asegurarnos, a mitad de ese tiempo abrimos y comprobamos. Dependiendo del tamaño de la freidora podemos hacer uno o varios huevos a la vez. Eso sí, aquí no saldrán con puntilla.
Huevo cocido
No necesitamos ni aceite. Ponemos una temperatura de 130º y ponemos el huevo en la cesta. Si lo queremos con la yema completamente cocida, serán 15 minutos. Si preferimos una yema más cremosa, bastará con 11-13 minutos; y si queremos un huevo con la yema líquida (clara cuajada), serán 9 minutos. Todo depende de los gustos de cada persona.
Ya decimos que con la freidora de aire todo depende la relación temperatura/tiempo y que el uso hará que encontremos nuestra mejor forma de usarla. Por ejemplo, a 170º tendremos el huevo con la yema completamente cocida en 12 minutos; más cremoso en 10 minutos; y el huevo duro, con la yema algo líquida, en 7 minutos. Incluso si queremos un huevo pasado por agua, a esos 170º bastará con unos 4-5 minutos.
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