Los políticos también disfrutan de la cocina, concretamente, de la alta cocina. Los que cocinan para ellos, muchos de ellos chefs de renombre, se reúnen cada año en las convenciones organizadas por el club Chefs des Chefs. En esta ocasión se han reunido en Madrid y los cocineros más selectos del mundo nos han desvelado algunos de sus secretos.
Con el lema “Si la política divide a la gente, una buena mesa siempre los une”, los chefs de altos cargos como Pedro Sánchez, Emmanuel Macron (Francia) o Ram Nath Kovin (India) han contado cuáles son las preferencias culinarias de cada uno de ellos. Sin duda, las que más nos han llamado la atención han sido las del primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
Su chef, Yen Chanty, contaba que el político “hace mucho ejercicio, come un montón y le gusta la comida local pero también experimentar otras cocinas”. Entre sus comidas favoritas figuran dos platos españoles: el jamón ibérico y la paella.
Aunque sean los alimentos más típicos y conocidos fuera de nuestras fronteras, ambos platos son amados incondicionalmente también por nuestros locales. El jamón ibérico español es uno de los productos mejor cotizados en el mercado internacional y es el sabor más característico de nuestra tierra.
En cuanto a la paella, no es de extrañar que haya conquistado al canadiense. El plato más conocido de nuestra gastronomía ha sido incluso reconocido como Bien de Interés Cultural y tiene tantas versiones como ingredientes existen, aunque la original y auténtica es la paella valenciana, con ingredientes como el conejo, el azafrán, el garrofó o la judía verde plana.
El amor por España del chef de Justin Trudeau
¿De dónde viene este amor por la cocina española? Todo comienza con su chef personal, el camboyano Yen Chanty. Cuando Trudeau ganó las elecciones, Yen, quien recientemente atrajo la atención por su tienda emergente de comida callejera camboyana, recibió la oportunidad de convertirse en el chef personal de la residencia oficial del primer ministro en Ottawa.
El chef camboyano ha demostrado en muchas ocasiones un gran amor por los platos típicos españoles. En una entrevista para la revista canadiense Scout, contaba que sentía nostalgia por el tiempo que pasó en San Sebastián y que, cuando podía, comía en taperías españolas en Canadá. “Elijo una combinación de tortilla de patata, pan con tomate y pimientos, y para bajarlo un trago de Estrella”, decía Yen en la entrevista. Quizá el chef haya conseguido transmitir esta pasión por lo español al primer ministro, que ahora se declara fan de platos tan típicos como la paella.
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