Es uno de los eventos del año, no solo para los fans del fútbol americano, sino también para los amantes de la comida. Según el Departamento de Agricultura estadounidense, la Super Bowl es el segundo día que más comida se consume en Estados Unidos, solo por detrás del Día de Acción de Gracias.
Durante la noche del domingo 12 de febrero, millones de estadounidenses se congregarán alrededor de sus televisiones, junto a sus amigos y familiares, para disfrutar del partido más importante del año. También para ver la actuación durante el descanso, que en esta ocasión tendrá a Rihanna como protagonista. Por supuesto, no faltará una mesa llena de comida. Hamburguesas, patatas fritas, alitas de pollo, salsas... Estos son los platos más consumidos durante la noche de la Super Bowl.
Alitas de pollo estilo 'Buffalo'
Según asegura el National Chicken Council (el Consejo Nacional del Pollo de Estados Unidos), los estadounidenses consumirán un récord de 1.450 millones de alitas de pollo durante el fin de semana del Super Bowl LVII. Las alitas picantes son el plato más consumido durante este evento deportivo, un clásico en las mesas estadounidenses.
Este plato nació en 1964 en un bar de Buffalo, Nueva York, cuando a la dueña del local se le ocurrió mezclar el pollo que sobraba con salsa picante. Esta salsa, hecha con cayena o chile y mantequilla, complementaba el sabor del pollo frito y se convirtió rápidamente en un éxito en todo el país.
Poco a poco, los restaurantes y bares incluyeron este plato en su menú, pues vieron en la carne de pollo deshuesada un producto barato y efectivo. Debido a la naturaleza picante y salada de su salsa, descubrieron además que las ventas de cerveza se disparaban cuando los clientes comían alitas. Al mismo tiempo, ocurría el boom de los bares deportivos, con múltiples televisores donde se proyectaba el evento deportivo más popular para ver con amigos: el fútbol americano. Así nació la unión entre ambos conceptos, y creció tanto que ya es impensable para los estadounidenses ver fútbol americano sin una alita en la mano.
Pizza, subcampeona en la Super Bowl
En 2022, se vendieron aproximadamente 12,5 millones de pizzas en Estados Unidos durante el día de la Super Bowl, según los datos de la American Pizza Community. Este año, se prevé que los datos sean similares.
Los principales vendedores de pizza de EEUU y sus servicios de comida a domicilio se estarán preparando para la jornada más ajetreada del año. Para ellos, el día de la Super Bowl suele ser un verdadero caos: según USA Today, las ventas en las pizzerías suben un 35% ese día, y la mayoría de las personas hacen sus pedidos de pizza una hora antes del inicio del juego.
La pizza es uno de los platos favoritos de los estadounidenses en cualquier día del año. Pero, normalmente, no tienen nada que ver con las que podemos probar en Roma o Nápoles. Las pizzas neoyorkinas, las más famosas en el país norteamericano, llevan pepperoni, tienen una base fina y de grandes dimensiones, de unos 45 cm de diámetro, y están pensadas para servirse en porciones o para compartir.
Nachos con guacamole
El picoteo es el rey de las cenas con amigos, y ya sabemos que los dips siempre triunfan. El guacamole mexicano es una de las salsas más famosas en Estados Unidos y otro de los platos que nunca faltan en las mesas durante la final de fútbol americano. Tanto es así que la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM) previene superar las 100 mil toneladas de aguacate enviadas el año pasado a Estados Unidos para cubrir la Super Bowl.
Elaborado a base de aguacate, cebolla, cilantro y chile verde, se suele servir como acompañamiento de los "chips", tortitas crujientes de maíz o totopos. Esta combinación es uno de los platos estrella de la Super Bowl todos los años y uno de los platos caseros más comunes para esa noche, por su sencillez a la hora de prepararlo y su delicioso sabor.
Los clásicos del 'fast food' americano
Además de los tres platos que ocupan el podio de las comidas más consumidas en la noche de la Super Bowl, hay otros alimentos imprescindibles. Las hamburguesas, las patatas fritas o los perritos calientes se comen tanto en casa como en el propio evento. En años anteriores, se han llegado a vender en el estadio alrededor de 55.000 perritos calientes.
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