La autonomía de un eléctrico se ve afectada por la temperatura debido principalmente a la calefacción y refrigeración auxiliares. La energía de la batería no sólo alimenta el vehículo, sino también los sistemas auxiliares, sobre todo la regulación de la temperatura del habitáculo y la batería. En lugar de calentar el habitáculo, los propietarios pueden utilizar los asientos y el volante calefactados para mantener el calor. Calentar el aire del habitáculo puede consumir entre 3.000 y 5.000 vatios, calentar el asiento y el volante, unos 75.
En lugar de encender la calefacción al entrar en el coche y tener que esperar a que las ventanillas estén libres de vaho, los conductores deberían considerar la posibilidad de calentar su coche mientras está enchufado, antes de entrar en el vehículo. Si el coche eléctrico está enchufado mientras se calienta, la autonomía no se verá afectada.
20MCada vehículo eléctrico tiene una modalidad Eco ligeramente diferente, pero en general todas ellas reducen el consumo de energía y aumentan el kilometraje reduciendo el suministro de energía al motor y a los elementos de alto consumo, como la calefacción del habitáculo. En invierno, los modos ecológicos pueden hacer que la conducción sea más segura: al reducir la potencia del motor, el coche acelera más despacio, lo que reduce la posibilidad de que las ruedas patinen en condiciones de hielo.
FREEPIKLa presión de los neumáticos disminuye a medida que baja la temperatura ambiente, lo que aumenta la resistencia a la rodadura y reduce la autonomía. Se aconseja comprobarla todos los meses, pero sobre todo cuando las temperaturas exteriores cambian considerablemente con las estaciones.
Independientemente del tiempo que haga, un factor que siempre afecta a la autonomía es cómo se conduce. Acelerar y frenar en exceso y conducir a altas velocidades gasta más energía. Anticiparse a la necesidad y evitar las frenadas bruscas permitirá que el sistema de frenado regenerativo recupere energía y la almacene de nuevo en la batería. Además, al anticipar cuándo es necesario reducir la velocidad, los conductores pueden reducir la necesidad de frenar a fondo, lo que significa que mantendrán el impulso y utilizarán menos batería para mantenerse a una velocidad adecuada.
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