El Mar Menor encamina una racha de hasta siete años, concretamente desde 2016, con diversos problemas en sus playas y paisajes marinos. La laguna salada se ha visto afectada por incertidumbres en los últimos años, por ejemplo desde el ámbito climático, ya que repercute también en otras actividades como la económica y la turística.
Este espacio natural está atravesando una fuerte y larga crisis sobre uno de los paisajes más queridos y habituales cada verano y eso tiene sus repercusiones. El atractivo territorio muestra graves problemas relacionados con su hábitat, ya que este paisaje ha presentado unas características no aptas, incluso en algunos momentos de este período para el baño.
Tras la etapa de la "sopa verde" o lo que es lo mismo, momento en el que el mar estaba completamente sucio, tanto que se no se podía ver ni el fondo, el Mar Menor llegó a un punto crítico hace cuatro años. Con la aparición de toneladas de peces muertos en la orilla, la situación era cada vez más incontrolable. No obstante, este 2023 parece que se ha reconvertido bastante, ya que las previsiones para la temporada turística son muy positivas, pese a la subida también en el precio de los alquileres.
Desde la Fundación Ingenio, una institución que defiende la tierra y el agua para la producción de alimentos, explican que la crisis del Mar Menor va mucho más allá de lo que pueda relacionarse con la actividad agrícola, ya que consideran que hay “factores que influyen con más fuerza”, como “la mala gestión de los vertidos de aguas residuales”, indican a La Información.
Las reservas vacacionales se mantienen en aumento
Según fuentes consultadas por La Información, la previsión del turismo en las playas de la Región son prometedoras. En el mes de mayo, en el caso del Camping del Mar Menor, el número de reservas respecto al año pasado es bastante similar. De acuerdo con sus previsiones, la ocupación debería alcanzar el 67-70% en el primes mes de verano, un 40-50% en julio, y un 47% en agosto. Estas cifras reflejan las previsiones de los meses más habituales, por lo que suponen que el número de reservas irá aumentando según se sucedan los meses.
Mientras, la trabajadora del camping declara que los meses en los que se cuenta con una gran demanda suele ser entre febrero/marzo, ya que la mayoría de sus residentes vacacionales se hospedan durante estos meses, porque son turistas extranjeros.
"Casas top" reservadas
Entre los sitios elegidos por la mayoría de las familias son las casas particulares, y las urbanizaciones con piscina privada, indica un profesional inmobiliario. Desde una inmobiliaria situada en la zona del Mar Menor, explican que las zonas con mejores condiciones de hábitat o "casas top", como las definen exactamente, "ya están reservadas desde poco después de Semana Santa". Incluso en julio y agosto, las reservas prevén estar por encima del año pasado.
En relación a los turistas, comentan a La Información, que la mayoría de ellos suelen ser residentes habituales de estos descansos, aunque también suelen visitar nuevos veraneantes que quieren conocer el ambiente y vivir la experiencia en la costa murciana.
La Covid, un punto de inflexión
La repercusión de la Covid-19, ha afectado a las actividades diarias durante más de dos años por esta crisis sanitaria y también ha transformado las actividades turísticas, por ejemplo a cómo se planifican las visitas culturales.
Desde el Museo de San Javier, en la zona del Mar Menor, ha aumentado las visitas, ya que la gente “quiere salir” tras este período de crisis, comentan fuentes del propio museo. Aunque hasta el momento las reservas siempre se han realizado semana a semana, las previsiones de este año son bastante buenas.
Lo mismo sucede con otras actividades como el parque infantil Peke Park La Manga o el Club de Pádel Dos Mares, donde se prevé muy buen verano, comunican distintas profesionales. Además desde este club, han tenido que contratar a más personal porque tienen bastantes reservas para las clases que imparten, indican fuentes del Club de Pádel Dos Mares.
Soluciones
Este año, el espacio natural de la costa murciana aumentará sus visitas según la previsión de distintas fuentes cercanas a este medio. Pero los problemas persisten y la Fundación Ingenio manifiesta algunas soluciones como "implementar tecnologías", la "construcción de un colector que rodee la ribera del Mar Menor", o la propuesta del "Anillo Protector Ambiental".
A partir de estos problemas, se han acordado diferentes medidas. Entre las medidas destaca la del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que consiste en una nueva mejora de hasta 20 millones de euros, cuyo objetivo es "acometer 88 actuaciones con las que reforzar los sistemas de saneamiento y depuración en la cuenca vertiente de la laguna", comenta la fundación.
A pesar de que el turismo en el Mar Menor esté en continuo crecimiento, la realidad tiene otras variables, ya que fuentes consultadas por este medio, indican que muchos de estos veraneantes, deciden pasar el día en otras playas cercanas.
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