CCOO Y UGT RECHAZAN EL ERE EN ABENGOA Y ADVIERTEN DE QUE NO SE QUEDARÁN "DE BRAZOS CRUZADOS"

- Los sindicatos denuncian que la compañía "rompe" el clima de diálogo al no consultarles. CCOO y UGT expresaron este martes su rechazo al ERE planteado hoy por la dirección de Abengoa y que supondría el despido del 10% de la plantilla de la compañía, cerca de 500 trabajadores de un total de 5.000.
Además, la dirección también habría propuesto un ERE extintivo en Inabesa, según afirmó a Servimedia el secretario general de CCOO de Industria de Andalucía, José Manuel Moreno.
“No estamos de acuerdo con el ERE extintivo y no estamos de acuerdo con que se toque el empleo fijo en Abengoa”, aseguró Moreno, quien considera que la compañía “necesita establecer una línea de financiación que permita caminar adecuadamente a Abengoa” y evitar así ambos expedientes de regulación de empleo.
En este sentido, Moreno cree que la liquidez necesaria para Abengoa debe proceder de un crédito de 1.800 millones por parte de los bancos que, en estos momentos, está pendiente de la aceptación, por parte de los acreedores, de los términos del preacuerdo alcanzado para refinanciar la compañía.
"ROTO" EL CLIMA DE DIÁLOGO
Por su parte, en una nota de prensa, el secretario de Negociación Colectiva y Salud Laboral de MCA-UGT, Jesús Ordóñez, expresó su malestar por haber conocido la información a través de la prensa y lamentó que la dirección de Abengoa “no se haya dirigido a los sindicatos”.
De esta forma, el sindicato considera que se “rompe” con el clima de diálogo establecido entre las organizaciones sindicales y la empresa y afirma que “desconoce” el plan de viabilidad en donde se recoge la aplicación del ERE en Abengoa.
En concreto, la federación aseguró no saber “a cuáles de las más de 300 filiales de Abengoa afectará el procedimiento, qué tipo de medidas van a adoptarse y a cuántos trabajadores va a afectar”.
REUNIÓN DE URGENCIA
Por todo ello, MCA-UGT exigió la convocatoria de una “reunión de urgencia” con la dirección de la compañía en la que se informe a los sindicatos del contenido del plan de viabilidad y en la que se puedan consensuar las medidas que vayan a plantearse y afecten a los trabajadores. Además, advirtió de que la organización sindical “no se va a mantener con los brazos cruzados mientras la dirección carga en los trabajadores la responsabilidad de una mala gestión”.