Décimo día de huelga de transportistas y las posturas entre Gobierno y manifestantes aún se encuentran alejadas, mientras que la cadena de suministros del sector alimentario -especialmente, los frescos- está en jaque. Por lo pronto, Heineken, Grupo Gallo, Danone, Lactalis (Puleva) ya han alertado de que una serio desabastecimiento si los paros no cesan de forma inminente. La situación es tal que ha forzado a Nadia Calviño a acelerar la reunión para bajar el gasóleo.
De esta forma, quiere hacer frente a una de las demandas principales que ha llevado a la huelga y manifestaciones a los transportistas: los inasumibles precios de los carburantes. Los datos hablan por sí solos y es que el gasóleo y la gasolina nunca antes habían estado tan caras. En algunas estaciones se han llegado a superar, incluso, los 2 euros por litro.
Por este motivo, los transportistas que se han sumado a las protestas aseguran que están en una situación crítica "por las alzas incontroladas del precio de los carburantes" y que están perdiendo dinero por salir a trabajar. La capacidad máxima del depósito de un camión es de 1.500 litros. Esto, en dinero contante y sonante, supone -teniendo en cuenta el precio medio actual del gasóleo (1,80 euros/litro)- es de 2.700 euros.
Hasta 700 euros más que en enero
Tal y como explicaba Juan José Gil, secretario general de Fenadismer, al podcast de La Información: "Ahora mismo un transportista que va a repostar a una gasolinera está pagando entre 500 y 700 euros más que lo que pagaba a principios de año. Esto es insoportable para muchas economías familiares, para muchas pequeñas empresas de transporte que, por otra parte, son mayoritarias en el sector".
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