Las entidades de financiación respaldarán inversiones sostenibles de empresas y particulares, en un momento en el que la sostenibilidad se ha convertido en un factor determinante en la gestión de las empresas e instituciones, y que tomará aún mayor impulso gracias a los fondos de recuperación de la Unión Europea. Fue la principal conclusión del foro sobre “el rol de las finanzas en una economía sostenible”, organizado por La Información, con el apoyo de Ibercaja, en el que participaron Antonio Burgueño, director de Calidad, Sostenibilidad y RSC de FCC Construcción; Francisco Sanz Piedrafita, jefe de soluciones de Finanzas Sostenibles de Ibercaja; Rafael Barrera Morcillo, director de Anpier; María José Leal, directora financiera de AEDAS Homes; y Susana Posada Gómez, vicepresidenta de DIRSE. El encuentro fue moderado por Jesús Martínez, redactor de La Información.
Los expertos analizaron cómo la economía sostenible está cambiando los mercados financieros y sus efectos en las empresas y los consumidores. Francisco Sanz Piedrafita, de Ibercaja, advirtió que “para seguir mejorando nuestra sociedad y el nivel de vida de todos sus habitantes, necesitamos llevar a cabo un desarrollo sostenible, que implica múltiples ámbitos como cambiar la forma de construir las casas, mover los coches, o fabricar y comprar ropa”. Y añadió que todos estos cambios requieren una gran inversión y financiación, que afecta tanto a empresas, que deberán cambiar algunos de sus procesos, como a particulares, que requerirán “cambiar las calderas de sus casas o poner placas fotoeléctricas”.
María José Leal, de AEDAS Homes, explicó que el cambio hacia la sostenibilidad se está produciendo “en todos los ámbitos y sectores”, y afirmó que en su impulso ha jugado un papel importante las nuevas necesidades de los inversores institucionales, que se enfocan en tres ámbitos: “el medioambiental, el social y el de buena gobernanza”. En esta línea, AEDAS aprobó en abril un plan estratégico con una serie de compromisos a 2, 5 y 10 años, “muy en línea con los objetivos tanto de la Unión Europea como de la ONU”.
Antonio Burgueño, de FCC Construcción, recordó como hasta no hace mucho tiempo la responsabilidad corporativa y la sostenibilidad “venían siendo como el patito feo” en las empresas. “Era algo de lo que había que convencer a la dirección de la compañía y que dependía mucho de tu capacidad de persuasión, mientras que ahora han cambiado las tornas y es la dirección la que se interesa por estos temas”. En estos momentos, sobre todo “después de una crisis como la que estamos pasando y con un mundo tan cambiante, todos somos conscientes de que hay que pensar y hacer mejor las cosas, y remar en el mismo sentido”.
Rafael Barrera, de Anpier (Asociación Nacional de Productores de Energía Fotovoltaica), aseguró que la transición ecológica es, prácticamente, sinónimo de transición energética, puesto que “el 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero vienen generadas por la forma que tenemos de extraer, transportar y consumir energía”. Y añadió que “el cambio de paradigma es inminente y va a ser drástico, como ya lo empezamos a ver”. En este contexto, “va a haber un cambio en la forma que tenemos los ciudadanos de consumir energía y esto va a movilizar grandes inversiones, que se situarán en los próximos 10 años en cerca de 200.000 millones de euros”. “Afortunadamente –añadió- hemos constatado que las entidades de financiación van a respaldar este tipo de inversiones, que son trascendentales para el país y que el ciudadano también va a demandar”.
Por su parte, Susana Posada Gómez, de DIRSE (Asociación Española de Directivos de Responsabilidad Social), se mostró optimista porque “en los últimos 2 o 3 años ha habido una evolución muy positiva de las finanzas sostenibles, que son necesarias para llevar a cabo el cambio hacía una sociedad mucho más justa, equitativa y en la que se cuide y respete el medio ambiente”.
Cambios en diversos sectores
El directivo de Ibercaja aseguró que la sostenibilidad traerá muchos cambios a corto plazo. Por ejemplo, “en el sector bancario cada entidad tiene la obligación, desde marzo de 2020, de explicar cómo integra los elementos de sostenibilidad en sus criterios de inversión y en el asesoramiento a sus clientes, y declarar las incidencias adversas”. Y debe tener en cuenta a éstas en un doble sentido: “cómo afecta el cambio climático y el factor de sostenibilidad a la inversión que estoy recomendando; y cómo afecta esa inversión al medio ambiente”. Además, a partir de agosto del año que viene “tendremos que tener en cuenta las preferencias de sostenibilidad de nuestros clientes a la hora de componer sus carteras”.
Para el directivo de FCC Construcción, la actuación de esta compañía se encuentra totalmente en línea con la sostenibilidad y la economía circular, ámbitos “en los que trabajamos habitualmente”. A su juicio, “el hecho de que en la sociedad haya un criterio cada vez más sostenible y preocupado por lo que se hace está beneficiando nuestra actuación y haciendo más visible el tema”. Además, aclaró que “las finanzas sostenibles significan que el inversor va a querer que hagamos cosas que están bien”, y aseguró que “desde que la legislación nos ha obligado a contar lo que estamos haciendo en sostenibilidad, se ha producido un cambio importante en las empresas en este sentido”.
El experto de Anpier insistió en que “el gran protagonista de la sostenibilidad va a ser el cambio de paradigma energético”, y recordó que la Unión Europea ha marcado una reducción de gases de efecto invernadero de un 55%, y “para asumir esa receta tan importante se necesita financiación”. Además, explicó que “instaladores, productores e inversores tienen que desarrollar un parque renovable”, y advirtió que “a día de hoy hay poca fotovoltaica instalada en un país con unas horas de sol extraordinarias”. Así,
indicó que “dentro de nuestro mix, la fotovoltaica apenas representa un 8%; y, por otra parte, solo un 25% de nuestros consumos son eléctricos y solo la mitad de ellos renovables, mientras que en 2050 deben serlos prácticamente el 100%, por lo que aún queda un recorrido muy importante”.
La directora financiera de AEDAS Homes destacó la importancia del sector de la construcción en la sostenibilidad y afirmó que “en dos años el 60% de nuestros proyectos tendrá una calificación energética A, o superior”. Además, puso en valor el desarrollo de técnicas modernas de construcción que engloban, por ejemplo, “métodos estandarizados en carpintería metálica y fachadas, que se producen directamente en fábricas, con un entorno más controlado y una mejor gestión de residuos”.
Por su parte, la vicepresidenta de DIRSE aseguró que también se ha producido una evolución muy positiva de los directivos de RSC en las empresas. Y explicó algunas de las competencias necesarias en estos directivos, entre ellas “las habilidades sociales, la capacidad de influenciar y un rol cada vez más estratégico y transversal”. Por otra parte, advirtió que los departamentos de RSC no deben considerarse solo como de iniciativas sociales, sino que también suponen ahorro de costes, optimización de procesos y una ventaja competitiva para la compañía”.
Principales retos
Finalmente, los ponentes del encuentro organizado por La Información resumieron los principales retos a los que se enfrentan los diversos sectores de cara a mejorar la sostenibilidad. Para Burgueño (FCC Construcción), es importante “conseguir que toda la empresa se implique con el tema y que todos seamos el departamento de Medio Ambiente y Sostenibilidad”. Mientras que para Rafael Barrera (Anpier), entre los retos más importantes están el de “la electrificación” y el de “socializar la generación y producción de la energía”.
Francisco Sanz (Ibercaja) abogó por “aprovechar la capacidad de comunicación que tenemos con millones de clientes para ayudarles a que conozcan los objetivos de desarrollo sostenible; decirles que estamos comprometidos con ellos trabajando para conseguirlos; y que creemos que es una buena idea que ellos también lo hagan, dándoles, por ejemplo, la oportunidad de financiar la compra de una vivienda más eficiente, y asesorándoles sobre cómo invertir en empresas que tienen en cuenta la sostenibilidad”.
María José Leal (AEDAS Homes) expresó su deseo de que “nuestros clientes vinieran a nuestras oficinas preguntando cuáles son las promociones inmobiliarias más sostenibles”, porque, a su juicio, “no todos tienen aún la misma concienciación en sostenibilidad”. Mientras que Susana Posada (DIRSE) apuntó la necesidad simplificar los reporting y disponer de un marco común y homogéneo para hacer un análisis de la información sobre sostenibilidad de mayor calidad, lo que también facilitaría la relación con los inversores. Además, apuntó que es necesario “que no solo las compañías sino también los ciudadanos se comprometan” la sostenibilidad, para lo que hay que “generar la confianza suficiente”.
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