La Ley de Vivienda que entró en vigor el pasado 26 de mayo generó diversas opiniones tanto en el sector inmobiliario como en la sociedad en general. Desde los topes del alquiler, la poca cobertura ante los okupa o la regulación del derecho a la propiedad, fueron ciertos puntos que marcaron la agenda de las semanas antes de su promulgación. Sin embargo, ahora tras las elecciones municipales y autonómicas de este 28-M, el escenario es completamente distinto y los agentes del sector consultados por este periódico aseguran que hay algunas ‘lagunas’ de la Ley -que se sumaron a otros factores políticos- que han conseguido lastrar los planes electorales de Pedro Sánchez y el PSOE, dando paso al triunfo del PP.
Ahora la normativa de vivienda deja muchos puntos en el aire que dependerán de las nuevas administraciones autonómicas, y que los gobiernos del PP ya anticiparon que no implementarían estas políticas en sus comunidades. Es por esto que los expertos han comentado que existen diversos elementos del escrito que han afectado a nivel general para que se diera vuelta el resultado en diferentes zonas del país como Valencia o Cantabria donde ahora gobernará el Partido Popular. “La Ley ha tocado algo que en España es bastante sagrado como el tema de la propiedad y nosotros somos un país de propietarios”, dice la asociada de la Asociación Española de Personal Shopper Inmobiliario (AEPSI), Montse Moreno.
Los profesionales creen que existen distintas medidas que generaron esta inseguridad: el punto que permite que las viviendas viviendas que estén vacías durante más de dos años se vean afectadas por la aplicación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) - salvo que se justifique su desocupación temporal-; o los incisos sobre los alquileres de temporada; el polémico tope al alquiler y el índice que debe crear el Instituto Nacional de Estadística (INE) en los próximos años; la inseguridad de los okupa, o también que se avale que el inquilino deje de pagar. "Sobre todo estas ‘inquiokupaciones’ porque afectan directamente a los pequeños propietarios que son la gran mayoría de los que están en el mercado inmobiliario español”, añade la experta de AEPSI.
El problema, según indica Moreno, es que todas las medidas de la normativa aprobada “hace que la gente vea inseguridad jurídica y el dinero es muy conservador”, por lo que optan por medidas que puedan protegerlos como las propuestas de la derecha en ámbitos de vivienda. La ley con el resultado electoral "va a tener prácticamente unos días de vida y nace muerta porque el PP ya ha dicho que no va a aplicar en las regiones donde gobierna. Ha sido tal el vuelco electoral, que más allá de Asturias, veremos lo que ocurrirá finalmente en Barcelona o Castilla-La Mancha donde sí se dice que se aplicará", comenta la directora general adjunta de España para Masteos, Beatriz Toribio.
Los agentes aclaran también que la Ley de Vivienda no es un factor único para lo ocurrido el domingo pasado, sino que esta se suma a diversos factores políticos y sociales que ya venía arrastrando el Ejecutivo desde hace un tiempo. Sin embargo, algo que también dañó la imagen del anuncio de vivienda fue el pacto que realizó el presidente del Gobierno con los partidos de izquierda Esquerra Republicana y EH Bildu para anunciar el lanzamiento de la ley. Después de dos años de negociaciones consiguió cerrar los últimos cabos sueltos del documento, pero "el hecho de que exista esta coalición y que haga alianzas con la izquierda más extrema, hace que aparezcan los fantasmas de los países de Latinoamérica", comenta Moreno.
Derecho a la propiedad, tope al alquiler, okupas, limitaciones de renta de alquiler... Los expertos creen que estos factores favorecieron la debacle
"El regular el contenido del derecho a la propiedad en relación la función social de la misma, también no se acepta bien por muchos propietarios, a los que la ley les crea mucha inseguridad jurídica e incerteza sobre la propiedad", zanja La Información el vocal del Consejo General de los COAPI de España, Francisco Nomdedeu. El especialista dice que respecto a los procedimientos para recuperar la posesión de viviendas por casos de okupación o por falta de pago de renta, se complican los trámites y plazos para el propietario, por lo que esto provocó un efecto adverso al que se buscaba con la normativa. Además, suma otros 'ingredientes' que afectaron el debacle: la baja del número de inmuebles para el gran tenedor, temas de ordenación urbanística; la declaración de zonas tensionadas; las limitaciones de renta de alquiler; la actualización de los alquileres y prórrogas obligatorias de los contratos.
"El daño ya está hecho. Porque durante muchos meses se ha frenado inversión de quienes quería venir a nuestro país con los mensajes que lanzaba esta ley. Entre esta y muchas cosas se ha afectado al pequeño y mediano propietario y al institucional", plantea Toribio. Con los resultados de las municipales y autonómicas, la normativa y los anuncios relacionados a la vivienda como los avales del ICO del 20% o las viviendas en suelos e la Sareb, se "ha demostrado que se hicieron medidas al momento y que se aprobó una ley que el electorado entendió que no era la el camino correcto para solucionar este problema".
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