Las propuestas de Juncker para impulsar una UE en crisis

Seguridad, defensa, crecimiento, empleos... El presidente del ejecutivo europeo, Jean-Claude Juncker, desveló este miércoles su plan para sacar a la UE de su crisis existencial, con una serie de reformas destinadas a convencer a los 500 millones de ciudadanos europeos.

"Los próximos 12 meses serán decisivos si queremos reunificar de nuevo a nuestra unión", subrayó Juncker durante su esperado discurso sobre el "Estado de la Unión", el primero desde la decisión británica de abandonar el bloque.

A continuación, las principales propuestas:

La seguridad será el principal asunto que abordarán los mandatarios de la UE, en su reunión del próximo viernes en Bratislava sin Reino Unido. Juncker adelantó las propuestas del ejecutivo comunitario.

La Comisión busca mejorar la seguridad en las fronteras exteriores del bloque, con la puesta en marcha rápidamente de un cuerpo de guardias fronterizos y de guardacostas que reemplazará a la agencia Frontex.

"Quiero ver el despliegue desde el mes de octubre de al menos 200 guardias fronterizos y 50 vehículos adicionales en las fronteras exteriores de Bulgaria" con Turquía, solicitó.

La UE reforzará además antes de finales de año las modalidades de control de las personas que entren o abandonen territorio europeo y propondrá "un sistema automatizado para determinar quién será autorizado a viajar a Europa", en la línea del dispositivo ESTA existente en Estados Unidos.

Jean-Claude Juncker reclamó recursos militares comunes entre países de la UE, "que en algunos casos serán competencia de la Unión y plenamente complementarios con la OTAN", organización a la que pertenecen 22 de los 28 países del bloque.

Asimismo, en la línea expresada a principios de septiembre por la jefa de la diplomacia europea Federica Mogherini, propuso la creación de "un cuartel general único en la UE" y de "un fondo europeo de defensa" para "estimular activamente la investigación y la innovación" en esta industria.

El impulso de la defensa europea es uno de los grandes proyectos que buscan acordar los países del bloque desde el anuncio de la marcha de Reino Unido, una de sus principales potencias nucleares y militares y uno de los países más reticentes a avanzar hacia un ejército común.

Para estimular el crecimiento y la creación de empleos tras el crash financiero de 2008, el ejecutivo europeo puso en marcha hace un año un plan de inversión de 315.000 millones de euros durante tres años, que Juncker quiere ahora ampliar hasta "alcanzar los 360.000 millones de euros" para 2022.

Este fondo, financiado por el presupuesto europeo y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) en unos 21.000 millones de euros, busca atraer a inversores privados que deseen financiar proyectos en diferentes sectores como la energía, las infraestructuras o la investigación.

En esta misma línea, Juncker anunció el lanzamiento de un nuevo fondo de al menos 44.000 millones de euros destinado a África y a países vecinos para ofrecer perspectivas económicas y disuadir así a los candidatos a la emigración hacia Europa.

El ejecutivo europeo desveló una propuesta de reforma de los mercados de telecomunicaciones europeos, uno de los sectores, a su juicio, con enormes posibilidades de creación de empleo.

El objetivo es estimular la inversión en banda ancha para preparar la UE para la quinta generación de telefonía móvil (5G), cuyo lanzamiento comercial mundial tendrá lugar en 2020, y así seguir siendo competitivos frente a Estados Unidos y Asia.

Ante la Eurocámara, Juncker se fijó el objetivo de "equipar cada pueblo y cada ciudad de Europa de acceso a internet inalámbrico y gratuito alrededor de los principales espacios públicos antes de 2020".

"Debemos trabajar por una Europa que ponga en valor a nuestros ciudadanos y a nuestra economía. Y, hoy en día, tanto lo uno como lo otro se encuentra en lo digital", resumió Juncker en su discurso.

El ejecutivo quiere así facilitar la difusión en línea de contenidos audiovisuales entre los 28, pero cuyos derechos de autor se hayan adquirido en un sólo país, una medida esperada y temida por los medios artísticos y del sector audiovisual.

Y, al mismo tiempo, propone que los editores de prensa puedan reclamar derechos de autor a Google News o Facebook, por los artículos en línea publicados en estos sitios, al considerar que obtienen beneficios indirectamente.

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