SOCIALISTAS ANDALUCES SE CONCENTRAN ANTE AGRICULTURA CONTRA LA REFORMA DE LA PAC

Más de 200 socialistas andaluces, entre alcaldes, portavoces, concejales y presidentes o cargos de diputaciones provinciales, se concentraron hoy frente al Ministerio de Agricultura para manifestar su “total desacuerdo” con la reforma de la PAC y para exigir al Gobierno de España la inclusión del olivar, el trigo duro y la uva pasa en las ayudas asociadas.
El secretario general del PSOE de Jaén y presidente de la Diputación, Francisco Reyes, recordó que el Ministerio tiene de plazo hasta el 1 de julio para modificar las ayudas asociadas y avanzó por ello: “Los socialistas vamos a hacer todo lo que esté en nuestro mano para arrancar al PP lo que creemos que es justo”.
Reyes subrayó la ausencia de representantes del PP, "a los que se les llena la boca en la defensa del campo y cuando tienen que defender los intereses de Andalucía brillan por su ausencia”.
Admitió que “sólo se podrían incorporar 45 millones de euros a estas ayudas asociadas para toda España”, de los que en torno a 33 millones podrían llegar a Andalucía, y que esta cuantía "es una tirita para una gran herida de 616 millones de euros", pero mostró su empeño en luchar por ellos.
LA ÚNICA QUE PIERDE
El responsable socialista enfatizó que la pérdida global de la PAC en Andalucía, incluyendo los fondos de desarrollo rural, se eleva a 902 millones de euros, y que es “la única comunidad autónoma de España que pierde con esta reforma”. Según su interpretación, la reforma de la PAC fue diseñada por el PP para “beneficiar a otras comunidades"
El presidente jiennense denunció que en el anterior marco comunitario los perceptores de ayudas de menos de 5.000 euros no sufrían retención alguna, mientras que los perceptores de ayudas de más de 300.000 euros sufrían retención del 14%. Con el nuevo marco, los agricultores con menos de 5.000 euros sufren un recorte del 16%, y se han eliminado las ayudas inferiores a 300 euros.
El responsable socialista recordó que Arias Cañete se comprometió en su momento con las organizaciones agrarias a que Andalucía no perdería un euro y al final ha perdido 616 millones y tiene que "competir con un olivar italiano que tiene ayudas asociadas”.
Sobre todo, concluyó, la situación es una “auténtica barbaridad” para el olivar menos productivo, el olivar de pendiente, “que es imposible de mecanizar, que lo recogen las familias y que ha permitido mantener la población en las sierras y en el medio rural”.