El presidente de Unicaja, Manuel Azuaga, ha interrumpido todas las intervenciones de los accionistas que cuestionaban por la crisis de gobernanza germinada en la Fundación Bancaria -principal accionista de la entidad- en su junta general ordinaria de 2022, la primera que se celebra tras la fusión por absorción de Liberbank. "No me gustaría intervenir permanentemente, si sabéis que no se puede hablar de ningún accionista, no me hagáis interrumpiros", ha subrayado el banquero tras interponerse en varias ocasiones.
A medida que la censura se iba profundizando, la tensión de los intervinientes se ha ampliado. "En la gestión de este banco hay mucho teatro, perdónenme, lo digo con el corazón y la mayor humildad", ha añadido uno de los accionistas, que inicialmente no pretendía participar en la asamblea pero se ha lanzado al sentir el sentimiento de bronca cada vez más agudo. "¿Código de gobernanza?", se ha preguntado, añadiendo que es un "sainete, casi todo ficticio". Posteriormente ha lamentado que el banco esté traicionando el espíritu de los malagueños. El presidente del grupo ha interrumpido, de nuevo, para asegurar que la posible mudanza de Unicaja a Madrid es "una noticia falsa".
Los accionistas lamentan que Unicaja Banco no haya publicado un comunicado para aclarar el "Sálvame" que tiene la entidad con la Fundación, pues han insistido en que estos problemas les afectan porque la entidad que preside Braulio Medel posee un 30% del capital. A la vez que Azuaga pedía no continuar comentando sobre este asunto, los accionistas han recriminado que repercute en la imagen de la sociedad. "Creo que es un tema que debe aclararse, eh", ha insistido uno de los accionistas.
La preocupación de todos los asistentes sobre la gobernanza del banco es absoluta. No consideran aceptable que la quinta entidad española aparezca todos los días en los medios por luchas internas, dimisión de consejeros independientes y posible falta de honorabilidad. "Mostramos nuestra profunda preocupación por esta situación y reclamamos al consejo, a los supervisores y a los reguladores que se reconduzca", ha remarcado en este caso CCOO, que ha reclamado una garantía del control y un mantenimiento de la vinculación territorial.
Muchos consideran que la deriva de la entidad ha llegado tras la fusión, momento en el que se ha introducido un modelo de gestión lleno de conflictividad. "Cierren ya los conflictos internos y externos, y cumplan con la legalidad. La mala reputación baja las ventas", ha advertido el Sindicato Suma-t de Unicaja Banco. De CIC también se han pronunciado al respecto, pues consideran que no se puede confiar en algunos de los miembros del consejo de administración actual. Finalmente, la renovación de la cúpula ha sido aprobada.
Los últimos balances de Liberbank también han estado en el foco de los intervinientes. Entienden que se realizaron actuaciones lo suficientemente graves como para desconfiar de las cuentas. Uno de los requerimientos a los que hicieron alusión fue al de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sobre la interpretación contable en la anotación de una prima de seguro de Caser. Liberbank se vio obligado a corregir un apunte del balance del ejercicio 2020. La entidad aplicó un criterio contable para el registro de las comisiones complementarias del contrato de novación con Caser que al supervisor no le convenció.
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