La consejera delegada de Bankinter, Gloria Ortiz, ha advertido de que la demora en el nombramiento del nuevo gobernador del Banco de España (BdE) hará al país "perder peso" dentro de las instituciones europeas. "El retraso afecta fundamentalmente a que en la última reunión del Banco Central Europeo (BCE) no hemos tenido voto (...). Las decisiones que se toman allí afectan nos impactan y mucho", ha subrayado la banquera durante la presentación de los resultados semestrales.
Tras evitar pronunciarse sobre la candidatura de José Luis Escrivá, actual ministro de Transformación Digital y Función Pública, propuesto a petición del Gobierno, y que el Partido Popular (PP) rechazó, Ortiz ha instado a designar "cuanto antes" al próximo gobernador. "Es un puesto de mucha influencia y responsabilidad", ha añadido, destacando que el perfil debe ser un profesional con "probada experiencia y capacidades". El Ejecutivo aspiraba a contar con el nuevo sucesor de Pablo Hernández de Cos antes de este jueves, 18 de julio. Sin embargo, el choque por esta elección ha trastocado su hoja de ruta.
Una de las principales quejas deriva en que la independencia del organismo puede verse perjudicada al poner al frente a un miembro que actualmente se sienta en el Consejo de Ministros. En este sentido, Ortiz ha señalado que no se "pronunciará" sobre cuestiones de índole política y que sus capacidades deben valorarlas "quienes los eligen". "Se trata de un puesto muy importante para la banca", ha incidido. En el momento actual es la 'número dos' del organismo, Margarita Delgado, quien ha asumido este cargo en funciones, ya que así lo permiten los estatutos, al menos hasta que expire su mandato en septiembre.
Integración de EVO Banco
Bankinter, que ha obtenido un beneficio neto semestral de 473 millones en el que han sido sus mejores seis meses de la historia del banco, se encuentra inmerso en pleno proceso de absorción de su filial, EVO Banco. Anunciado hace poco menos de un mes, la entidad todavía no ha solicitado autorización formal al Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, paso que realizará en las próximas semanas. No obstante, ha puntualizado que "no le han trasladado ninguna preocupación" desde el departamento.
La decisión se ha dado a conocer al mercado en plena opa hostil de BBVA sobre Banco Sabadell, operación que ha generado recelos en el seno de Moncloa. En este contexto, Ortiz ha admitido que cualquier fusión supone una oportunidad de negocio para el resto de entidades, aunque éstas no afloran hasta que comienza a materializarse la integración. En cualquier caso defiende que una reducción en el número de entidades redunde en una menor competencia. "La competencia tiene más que ver con el apetito de los bancos", ha apostillado.
En un contexto marcado por el inicio de las bajadas de los tipos de interés, que arrancaron el pasado mes de junio, el banco anticipa que será un ejercicio positivo en el que la pausada caída del euríbor les ayudará a reforzar el balance. "Vamos a trabajar para que no haya una caída del margen de intereses", ha defendido Ortiz, después de que esta magnitud ya haya dado síntomas de moderación tras crecer solamente un 9% durante los seis primeros meses del año.
El freno en la repreciación de la cartera de crédito comienza a verse compensado por la mayor producción hipotecaria, que ya arroja los primeros brotes verdes. En cualquier caso, se han mostrado prudentes sin comprometerse a romper la barrera de los 1.000 millones de beneficio. En 2023 las ganancias fueron de 845 millones sellando los mejores doce meses de la historia hasta la fecha.
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