La banca española ha batido un nuevo récord de beneficio con unas ganancias cercanas a los 6.700 millones en el primer trimestre. En concreto a 6.676 millones, que suponen una mejora del 17% con respecto al mismo periodo de 2023, cuando el Banco Central Europeo (BCE) no había ejecutado la mayor parte de las subidas de los tipos de interés. De esta cantidad, poco menos de la mitad (44%) se ha obtenido en España, hasta un total de 2.954 millones, influida por el peso que desempeñan las filiales en entidades como BBVA o Banco Santander. El sector ha exprimido los vientos de cola derivados del encarecimiento del precio del dinero en los últimos trimestres. Ahora que la 'fiesta de los tipos' llega a su fin, hay divergencias acerca del tirón del negocio nacional para el periodo 2024-2025 y no todos son tan optimistas como parece Carlos Torres en su deseo de absorber Banco Sabadell.
De hecho, ha sido uno de los bancos del Ibex que se ha mostrado más optimista en la última racha de presentaciones de resultados. El banco con sede en La Vela ha actualizado al alza las previsiones para este ejercicio con la expectativa de crecer a doble dígito, frente al solo dígito que esperaban con anterioridad. La mejora se apoya en todas las regiones en las que operan, incluidas Latinoamérica, Turquía o México -el principal motor de su cuenta de resultados-, y especialmente en España, región para la que manejan un escenario de mayores ingresos recurrentes y que reforzaría la integración de Banco Sabadell. Esta hoja de ruta en la que el efecto de tipos más bajos se verá compensado por otras vías de expansión, impulsando la rentabilidad medida en términos de ROTE por encima del 17,7% contabilizado entre enero y marzo, fue adelantada por el número dos, Onur Genç antes de trascender la propuesta de fusión con el banco catalán.
El segundo intento para crear el mayor grupo bancario del país por volumen de activos, destronando a CaixaBank, sin tener en cuenta los negocios en el exterior, puede cambiar este escenario, sobre todo, para Sabadell. La firma catalana, en contranste con BBVA, admitió la semana pasada que espera un freno en su actividad en España, que es su principal mercado. "El incremento del margen de intereses registrado anteriormente no se va a ver más", comentó el consejero delegado del grupo, César González-Bueno, en relación a las perspectivas que contemplan para el ejercicio. Si bien aspiran a cerrar diciembre con un nuevo récord de ganancias tras romper la barrera de los 1.300 millones en los doce meses anteriores, hay dudas de cara a 2025, cuando la mayor parte de su crecimiento recaería sobre su filial británica, TSB, a falta de conocer más detalles sobre los últimos movimientos corporativos.
En Banco Santander, por su parte, que ha contabilizado 772 millones en beneficios en España, confía en que el crédito impulse este resultado de cara a los próximos meses. Después de 31 meses consecutivos de aumentos en la captación de clientes de "alto nivel" considerados como tal aquellos que "aportan volumen de negocio", según ha apuntado el CEO de la entidad, Héctor Grisi, la reactivación de la demanda de préstamos hipotecarios, así como en el segmento de empresas, en el que se empieza a ver dinamismo, serán clave para apuntalar este dato.
En la misma línea se ha pronunciado Bankinter, que tras cosechar un primer trimestre histórico, ve un "enorme potencial" en todas las geografías en las que opera. Más allá de Irlanda y Portugal, ven margen incluso en los mercados maduros a corto plazo, en alusión a España bajo la premisa de que el proceso de recorte de las tasas de referencia serán menos rápidas e intensas de lo que se descontaba a priori.
Pese a que el ajuste que se vislumbra para el euríbor, índice que marca el precio de las hipotecas, acabará afectando al margen de intereses, las entidades de perfil doméstico como CaixaBank han revisado al alza sus estimaciones, anticipando una mejora de hasta el 5%. La incertidumbre en torno a la profundidad de los movimientos que ejecutará Christine Lagarde le da un plus de optimismo de cara a este 2024, en el que el negocio de seguros, ahorro y pagos se convertirán en su punta de lanza para mantener la rentabilidad. Por último, Unicaja, que desarrolla su actividad exclusivamente en el territorio nacional, ha avanzado a los analistas que los 111 millones obtenidos hasta marzo, multiplicando por tres los obtenidos doce meses antes, marcan el paso a las guías para los siguientes tres trimestres.
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