El expresidente de Sacyr, Luis del Rivero, se ha mostrado a favor de la ampliación de capital que planea ejecutar BBVA para poder integrar Banco Sabadell. El exdirectivo ha mostrado su respaldo durante la junta extraordinaria de accionistas celebrada este viernes en Bilbao, con un "pero" incluido. Las dudas sobre esta operación que dará lugar a un 'megabanco' vienen del lado del equipo directivo. En concreto, Del Rivero ha cuestionado la idoneidad de los primeros espadas actuales, planteando la posibilidad a que sea Josep Oliu, presidente no ejecutivo, quien asuma las riendas en caso de que la opa salga adelante.
Del Rivero apoya su argumento en torno a la polémica por el 'caso Villarejo' después de que hace unas semanas el juez haya solicitado enviar a juicio a BBVA como persona jurídica, así como a varias personas que actualmente ocupan puestos de dirección dentro de la entidad. Entre ellos, el actual responsable del área de servicios jurídicos Eduardo Ortega y el jefe de auditoría interna, Joaquín Gortari. En la causa también se incluyen el ex jefe de Seguridad de la entidad bancaria Julio Corrochano, el exconsejero delegado de BBVA, Ángel Cano, y el exdirector de Riesgos, Antonio Béjar.
En opinión Del Rivero se deberían fichar a "responsables con gran trayectoria" como parte de la solución a la situación en la que está inmersa el banco a cuenta de los supuestos encargos ilegales al comisario de Policía jubilado, José Manuel Villarejo. Cabe destacar que el antiguo jefe de Sacyr-Vallehermoso fue víctima de dichos espionajes a encargo de la entidad, por lo que es un tema que menciona de manera recurrente en las juntas de BBVA, del que es accionista. "Es el primer banco en un proceso penal. Es evidente que no son adecuados para esta operación", ha subrayado.
Después de ensalzar la trayectoria profesional de Josep Oliu como banquero, ha instado a dar carpetazo a la "era de Francisco González" y evitar despidos. Se une así a las peticiones realizadas por los sindicatos que han intervenido en el encuentro, expresando su preocupación por los posibles recortes de personal que se pudieran producir. Finalmente, la ampliación de capital ha salido adelante con un 96% de los votos, en el que supone uno de los primeros pasos en la creación del tercer mayor banco de Europa. El propio Carlos Torres se ha comprometido a evitar salidas traumáticas, apuntando que en los ajustes de empleo acometidos en el pasado se alcanzaron acuerdos con los sindicatos.
Entre los que han apoyado la iniciativa también se encuentra la asociación de consumidores Adicae, desde la que aseguran que la potencial unión abre la puerta a los clientes de Banco Sabadell a recibir un trato mejor, especialmente, en lo relativo a conflictos judiciales. "La mayor solvencia resultante de la entidad fusionada, así como el acceso a la extensa red de oficinas de BBVA en toda España son aspectos positivos a considerar". La gran mayoría de los accionistas del BBVA que han intervenido han expresado su apoyo a la ampliación, desde los sindicatos hasta accionistas particulares. Una de las excepciones ha sido la Confederación Intersindical Galega (CIG).
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