Más allá del 'low cost'

Lidl y Aldi no frenan pese al alza de los alimentos: abren 2 tiendas a la semana

Montaje supermercados Aldi y Lidl
Lidl y Aldi no frenan pese al alza de los alimentos: abren 2 tiendas a la semana
Nerea de Bilbao (Infografía)
Montaje supermercados Aldi y Lidl

La competencia en el mercado de la alimentación en España sigue en plena batalla pese a la subida de precios en la cesta de la compra, que amenaza con lastrar el consumo y afectar a las cuentas de resultados de las cadenas. Hasta ahora no parecen haberlo notado, según se extrae de los resultados de 2022 que se han ido conociendo, pero todos coinciden en que se avistan tiempos difíciles por la inflación. Carrefour, con cuatro tiendas menos que el año anterior, subió sus ventas un 10%; mientras Día, que activó la venta de 235 establecimientos a Alcampo, ha visto crecer sus ventas un 5,4%.

Pero si hay dos cadenas que no cesan en su empeño de crecer en España, esas son Lidl y Aldi. Los supermercados alemanes, que ya acumulan más de dos décadas de presencia en España, continúan adelante con sus planes de expansión por todos los territorios y sus aperturas de nuevas tiendas alcanzan un ritmo equivalente a una por semana. Sin ir más lejos, Aldi prevé abrir un total de 50 tiendas por toda España a lo largo de este 2023. Su competidor, por el momento, no ha querido avanzar su previsión anual. 

En lo que llevamos de febrero Aldi ha inaugurado su primera tienda en Lanzarote (Arrecife) y la segunda en Asturias (Siero), y ha abierto tiendas en Masnou (Barcelona) y Valdebebas (Madrid). En marzo llegará a Córdoba, València y Can Picafort (Mallorca), y a lo largo del año ampliará su presencia a Melilla, territorio desconocido hasta ahora. 

El resto de aperturas se repartirán por Galicia, Asturias y los archipiélagos, aunque la mitad de las aperturas se situarán en sus regiones estratégicas: Madrid, Cataluña, Andalucía y la Comunidad Valenciana. Sus previsiones de contratación se elevan a 700 nuevos empleados en el primer semestre del año, hasta alcanzar los 7.400 en España a finales de junio de 2023. 

Por su parte, Lidl ha inaugurado este mes otras cinco tiendas en tres comunidades autónomas distintas: Málaga, Jerez de la Frontera y Huércal-Overa (Andalucía), Quintanar de la Orden (Toledo) y Alicante tras invertir 25 millones de euros. A esas se suma el centro abierto en enero en la localidad madrileña de Alcalá de Henares. En 2022 abrió 41 tiendas y modernizó una decena más tras una inversión de 290 millones.

La logística, pieza clave del crecimiento

Pero estos planes de crecimiento no se limitan a las tiendas: las nuevas demandas del cliente requieren de nuevas y mayores infraestructuras que se adapten a cuestiones como las compras online. Lidl cuenta a día de hoy con 11 plataformas logísticas repartidas por el país, pero ha previsto poner en marcha otras 5: Dos ya están en construcción en Escúzar (Granada) y Parla (Madrid); otro ha sido recientemente anunciado en León para dar servicio al noroeste peninsular; y ha proyectado otros dos en Martorell (Barcelona) y Constantí (Tarragona), que se suman a los tres abiertos desde 2019. 

Aldi, por su parte, está trabajando en la puesta en marcha de dos plataformas logísticas en Miranda de Ebro (Burgos) y Sagunto (Valencia), ambas con la idea de estar completamente operativas en 2024. En estos momentos tiene otras cinco operativas, una inaugurada en Gran Canaria el año pasado y otras dos (Andalucía y Cataluña) ampliadas. 

Lidl asegura haber duplicado su impacto en el PIB español desde 2016, que a día de hoy equivaldría al 0,65% del total hasta 7.000 millones de euros. Cerrará sus cuentas de 2022 con un total de 670 establecimientos en España, mientras que su competidor acabó el año con 394 tiendas y 6.600 empleados. 40 de estas tiendas abrieron en los últimos doce meses. 

Mismo modelo de tienda, distinto público objetivo

Ambas compañías han abogado por basar su expansión en un modelo similar de tienda: salas de ventas con unos 1.500 metros cuadrados de superficie y aparcamiento disponible para más de 100 vehículos. Tras mejorar su propuesta visual y la calidad de su marca blanca, ambas compañías han virado hacia disponer más productos frescos y de proximidad, con referencias regionales e internacionales. Las nuevas tiendas también cuentan con obrador de pan y bollería en tienda, y mantienen el bazar. 

Aunque sendas cadenas tienen su fuerza en las periferias urbanas, donde la disponibilidad de suelos para ubicar sus tiendas suele ser mucho mayor, han empezado su inmersión hacia los centros urbanos, aunque sea a costa de tener que quitar los parkings. En 2022, las aperturas de Lidl en la ciudad de Madrid se situaron en barrios de la periferia obrera como La Elipa, Quintana, Abrantes o Campamento, sustituyendo a antiguas galerías comerciales. Aldi, de momento, ha plantado su nuevo modelo de tienda en el PAU de Valdebebas, uno de los de mayor renta de la capital. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento