La histórica y familiar empresa española fundada en 1914, Puig, se ha estrenado este viernes 3 de mayo de 2024 en los mercados, finalizando el día en tablas, al mismo precio con el que arrancó su historia como cotizada: 24,5 euros. No obstante, la sesión ha sido muy intensa para la compañía, llegando a marcar un precio de 26,5 euros y también probando por primera vez en algunos momentos los números rojos, al bajar a 24 euros. La multinacional de fragancias ha celebrado el acto de toque de campana en la Bolsa de Barcelona. Sus acciones, además de en la Ciudad Condal, se negociarán en las bolsas de valores de Madrid Bilbao y Valencia.
Después de entrar a esta nueva fase bursátil, la familia Puig, fundadora de la marca, mantendrá el control del 71,7% de los derechos económicos de la sociedad y el 92,5% de los derechos a voto. El folleto de salida a bolsa de la empresa, publicado el pasado 18 de abril, consiguió una buena respuesta en el mercado y la propuesta fue sobresuscrita "múltiples veces en todo el rango de precios", según informó entonces la compañía. El precio por título se estableció finalmente en el máximo de la horquilla fijada en el folleto, de 24,50 euros por acción y una valoración de 13.920 millones de euros.
El presidente ejecutivo de la empresa, Marc Puig, ha resaltado su voluntad de gestionar la firma "con las luces largas", según recogen Europa Press y Efe de sus palabras tras el toque de campana al cual han asistido el consejero delegado de BME, Javier Hernani, el presidente ejecutivo del parqué barcelonés, Eduardo Ansaldo, y la directora de mercados de BME, Beatriz Alonso-Majagranzas. Puig ha considerado que la salida a bolsa de la multinacional es la "mejor" manera para asegurar el largo plazo de la compañía y la sostenibilidad del proyecto para las siguientes generaciones.
Ha añadido además que la familia ha gestionado esta empresa privada como si fuese una firma cotizada y, a partir de ahora, será "una compañía cotizada que actuará como si fuera privada", para agregar que el objetivo es seguir mirando a la próxima generación, que tiene por delante "un prometedor futuro". "Somos una familia con grandes dotes de generosidad", ha asegurado Puig, quien a la vez ha recordado las palabras de un antepasado animando a la familia a "hacer piña, porque juntos seréis más fuertes". También ha agradecido a todos los colectivos que han hecho posible esta salida a bolsa, desde los bancos, a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y a los inversores "por haber creído en nosotros".
Así será el capital social
El capital social de Puig, según recuerda Europa Press, se compone de acciones de clase A, que confieren cinco votos, y de clase B, que suponen un voto, aunque cada acción de clase B confiere los mismos derechos económicos que cada acción de clase A. Puig solicitó la admisión a negociación de las acciones de clase B en las bolsas de valores españolas, mientras que las acciones de clase A no forman parte de la oferta y no se solicitará su admisión a cotización en el mercado.
CriteriaCaixa, holding que gestiona el patrimonio empresarial de la Fundación la Caixa, ya anunció su entrada en el capital de Puig, con una participación del 3,05%, para lo que comprometió una inversión de 425 millones de euros.
La ruta de Puig hasta 2027
Después de cumplir su plan de salto al parqué, la firma española de perfumería y moda daba el pistoletazo de salida a su plan estratégico hasta el año 2027, en el que mantendrá, según explicó La Información el pasado 21 de abril, su apuesta por las marcas, la diversificación de producto y las compras. Sin embargo, dejará atrás los explosivos crecimientos de hace unos años, ya que la firma vaticina un crecimiento de un solo dígito en el medio plazo y que su margen de resultado bruto de explotación (ebitda) se mantenga estable.
Los esfuerzos de Puig se centrarán en hacer crecer sus marcas, productos y mercados del sector, pero a la vez tendrá el propósito de fortalecer su presencia en regiones, canales y productos a los que todavía tiene baja exposición. La compañía se fijará, por ejemplo, en fragancias, maquillaje y moda en Europa y América, con marcas como Carolina Herrera (con la que tiene el objetivo de llegar a 1.000 millones de euros de facturación; Paco Rabanne (que ya ha alcanzado ese volumen de ventas) o Charlotte Tilbury.
En el caso de los segmentos en los que Puig cree que todavía cuenta con recorrido, la empresa pondrá el foco en Asia-Pacífico (que representó el 10,2% del negocio en 2023), así como en la venta directa al consumidor (tiendas propias y online propio) y las marcas de nicho, especialmente en maquillaje y cuidado de la piel.
Así, el plan financiero de la compañía pasa por aumentar las ventas por superficie comparable a un solo dígito en el medio plazo. Esta evolución estará, sin embargo, por encima del crecimiento esperado para el mercado premium de la belleza, según la empresa. Puig también se ha propuesto desarrollar nuevos productos para “capturar” el crecimiento del mercado con la extensión de líneas de las marcas de su cartera.
La tecnología y los datos (con los que la firma está lanzando o reforzando el negocio online de sus marcas) y la integración de las adquisiciones más recientes, además de la sostenibilidad, serán los nuevos pilares de Puig en esta nueva etapa. Pero no dejará de lado las compras, ya que desde el año 2011 el grupo ha invertido 2.500 millones de euros en este aspecto: "Analizamos de forma cuidadosa oportunidades de fusiones y compras que encajen en nuestro objetivo de negocio y creen valor en nuestra familia de marcas", según señaló la empresa en el folleto de la opv.
Una multinacional familiar con historia
Con más de 100 años de historia, Puig es una multinacional de capital familiar controlada ahora por la tercera generación de la familia, que ganó el año pasado 465 millones y facturó 4.303 millones de euros. Durante los tres primeros meses del ejercicio, que finalizaron el 31 de marzo de 2024, Puig, que vende sus productos en más de 150 países con oficinas propias en 32 de ellos, aumentó un 10,1% sus ingresos.
El conglomerado de Puig incluye marcas como Rabanne, Carolina Herrera, Charlotte Tilbury, Jean Paul Gaultier, Nina Ricci, Dries Van Noten, Byredo, Penhaligon’s, L’Artisan Parfumeur, Uriage, Apivita, Dr. Barbara Sturm, Kama Ayurveda y Loto del Sur, así como las licencias Christian Louboutin, Banderas, Adolfo Dominguez, entre otras.
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