Luz verde a los dividendos tras el primer año de la Covid. La Junta General de Accionistas de Lar España ha aprobado este jueves la propuesta de repartir un dividendo de 31 céntimos de euro por acción, hasta un total de 27,5 millones de euros y una rentabilidad por acción del 6,7%.
La cotizada tiene una capitalización bursátil que supera los 460 millones de euros y se ha posicionado como uno de los principales vehículos inversores en el segmento de centros comerciales, una tipología que ha sufrido mucho por las restricciones impuestas debido a la pandemia. De hecho, el valor de sus activos retrocedió el año pasado un 4,9%, hasta los 1.475 millones de euros, lo que provocó un impacto contable de 100,7 millones de euros.
Sin embargo, la empresa consiguió elevar un 15% sus ingresos en 2020, desde 81,1 millones hasta 93,3 millones de euros. Por otra parte, El ebitda fue de 69,7 millones de euros, con una subida del 18%, y el beneficio neto recurrente alcanzó 53,7 millones de euros, un 30,3% superior a los 41,2 millones de euros obtenidos en 2019.
El presidente del Consejo de Administración, José Luis del Valle ha destacado en su discurso a los accionistas que "el Brexit y los atisbos de desaceleración del crecimiento en las principales economías hacían previsible cierto ajuste sectorial. La pandemia vino a agravar ese escenario, que lógicamente alcanzó también a nuestro sector específico del retail. En todo el mundo las empresas especializadas hemos debido aplicar cierres de actividades no esenciales y restricciones muy relevantes de distinto tipo en nuestros centros y parques comerciales".
En cuanto al impacto de la pandemia en las rentas de sus inquilinos, el empresario ha señalado que "hemos renegociado prácticamente el 100% de los más de mil contratos de alquiler existentes en nuestros catorce centros. Las bonificaciones acordadas, y por lo tanto el impacto en caja para el ejercicio, representó un importe final de 22 millones de euros, que a nivel de resultados se irá aplicando a lo largo de los próximos años".
El directivo ha valorado que el éxito alcanzado en 2020 se debió sobre todo a la "extraordinaria coordinación con nuestros comerciantes. Fuimos los primeros en implantar medidas de seguridad integrales, sometidas a certificación sanitaria independiente. En paralelo, conseguimos actualizar los acuerdos comerciales con la práctica totalidad de inquilinos, con tasas siempre cercanas a la plena ocupación técnica", indicó.
Aún así el empresario ha reconocido el golpe que ha recibido el sector y la necesidad de hacer ajustes. Del Valle ha matizado que la recuperación tenderá a concentrarse en los centros y parques comerciales prime: "Si antes los activos inmobiliarios dependían sobre todo de la ubicación, en adelante dependerán de su dominancia y capacidad de atracción de clientes finales y comerciantes. Es importante dónde se está, pero sobre todo cómo se está y junto a quiénes se está. Oferta comercial, experiencia de compra, entretenimiento, omnicanalidad y conocimiento del cliente marcarán las diferencias".
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