La autoridad financiera del Reino Unido acusó penalmente a nueve influencers de redes sociales —con un total de 4,5 millones de seguidores en Instagram— por promover un esquema de comercio de divisas extranjeras no autorizado. Según la Autoridad de Conducta Financiera (FCA, por sus siglas en inglés), Emmanuel Nwanze, de 30 años, y Holly Thompson, de 33, administraban una cuenta de Instagram bajo el nombre @holly_fxtrends para dar consejos sobre la compra y venta de contratos por diferencia, sin autorización.
Supuestamente, Nwanze dirigía el esquema de comercio de divisas y emitía promociones financieras no autorizadas. La autoridad indicó que Nwanze pagaba a influencers de redes sociales para promocionar @holly_fxtrends entre sus seguidores de Instagram. Entre los acusados se encontraban personalidades de la televisión como Rebecca Gormley, Biggs Chris, Eva Zapico y Jamie Clayton, así como Lauren Goodger, Yazmin Oukhellou y Scott Timlin.
"Los Contratos por Diferencia (CFD) son derivados de alto riesgo", declaró la FCA en un comunicado. "El 80% de los clientes pierden dinero al invertir en CFD debido a los riesgos".
Nwanze, Thompson y los influencers a los que pagaron han sido acusados de comunicaciones no autorizadas de promociones financieras. Si son declarados culpables, podrían enfrentar penas de hasta dos años de prisión.
Además, Nwanze enfrenta un cargo por violar una llamada prohibición general bajo la Ley de Servicios y Mercados Financieros de 2000, que prohíbe a las personas llevar a cabo actividades reguladas en el Reino Unido a menos que estén autorizadas para hacerlo.
Los acusados comparecerán ante el Tribunal de Magistrados de Westminster el 13 de junio de 2024. La FCA pidió a quienes crean haber sufrido pérdidas a causa del plan que se pongan en contacto con su centro de atención al consumidor.
La presentación de cargos de la FCA se produce después de que el organismo de control de la ciudad haya emitido múltiples advertencias de que tomará medidas contra personas influyentes en el ámbito financiero, conocidas como finfluencers , que promocionan ilegalmente productos financieros en las redes sociales.
En marzo, la autoridad supervisora emitió una nueva guía que detalla cómo los finfluencers y las empresas deben incluir adecuadamente los riesgos de los productos que promocionan y no exagerar las ganancias potenciales.
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