Crisis en bolsa. El Ibex 35, la referencia bursátil española, se desploma este lunes más del 3% y pierde los 10.400 puntos, en medio de un episodio de pánico en los mercados financieros, agitados desde la semana pasada por el repentino deterioro de la economía de EEUU, la caída al borde de la recesión en Alemania y el cambio del mensaje de la Fed sobre tipos de interés. La rotación hacia activos más seguros como los bonos está marcando el paso al desplome bursátil generalizado.
Se han registrado esta madrugada caídas históricas en algunos índices como el Nikkei 225 de Japón, que ha cerrado con un descenso del 12,4% en su mayor descenso diario desde el crash de 1987 en Wall Street. En solo tres días, la bolsa nipona se deja más del 20% en una crisis comparable a la pandemia de 2020 o lo ocurrido tras el desastre nuclear de Fukushima en 2011. El episodio de pánico en los mercados ha provocado el derrumbe en bloque del mercado de las criptomonedas, con un descenso de más del 12% en el Bitcóin, hasta 51.000 dólares.
La reacción de los inversores tan violenta tiene su reflejo en los índices de riesgo. El VIX, que mide los movimientos en opciones del S&P 500 y la búsqueda de protección de los inversores, registró el pasado viernes su mayor ascenso diario desde la pandemia de 2020-2021 con una subida del 60% y este lunes cotiza por encima de niveles de alerta financiera más allá de los 30 puntos, es decir, en espera de nuevos movimientos bruscos en el índice principal de bolsa para Wall Street.
Epicentro del terremoto: Tokio
El epicentro de la crisis bursátil aparece marcado en Japón, que se ha desplomado cerca del 20% en apenas dos sesiones, después del giro del banco central hacia las subidas de tipos de interés a contracorriente de lo que transmitió la Fed de EEUU o el Banco Central Europeo (BCE). El fortalecimiento del yen frente al dólar y el euro ha puesto contra las cuerdas a las grandes empresas japonesas exportadoras.
"Al respecto, señalar que los índices japoneses Nikkei y Topix tras registrar sus tres peores sesiones consecutivas desde el desastre nuclear de Fukushima en 2011, están camino de situarse en mercado bajista (20% inferior con respecto al récord máximo), mientras que los inversores se están refugiando en los bonos y el yen se ha fortalecido fuertemente, ante las perspectivas de que el Banco de Japón (BoJ) pueda seguir elevando sus tipos de interés de referencia", comenta Iñigo Isardo Rey, director de cuentas minoristas del bróker español Link Gestión.
Caídas generalizadas en el Ibex y Europa
El desplome de los índices bursátiles es generalizado. El Dax de Fráncfort retrocede cerca del 3%, con el Cac 40 francés bajando un 2,8% y el Ftse 100 de Londres, un 2,4%. El peor parado es el italiano Mib, que se derrumba un 4% en la Bolsa de Milán. La cotización del euro aparece estable en plena debacle y sigue en torno a los 1,091 dólares este lunes tras la fuerte subida que registró el viernes por la tarde después de conocer los datos de empleo más débiles de lo previsto en EEUU.
"Una corrección de este tipo puede ser vista como una oportunidad para que el mercado respire y se estabilice. Esto no necesariamente implica un cambio de tendencia hacia un mercado bajista prolongado, sino más bien un ajuste a valoraciones más sostenibles y realistas. En este contexto, la volatilidad actual podría ser una fase transitoria antes de que los mercados encuentren un nuevo equilibrio", señala Javier Molina, analista senior del bróker eToro.
De regreso al Ibex 35, ningún valor cotiza en positivo. Las mayores caídas se producen en Grifols (-4,2%), IAG (-3,8%) y Arcelor (-3,5%). Entre los pesos pesados el panorama es similar con los bancos liderando los descensos. Santander y Sabadell caen más del 3,3%, mientras que BBVA y Caixabank recortan alrededor del 2,%. Telefónica cae un 2,2% e Iberdrola un 1,6%. La textil Inditex retrocede un 2%.
"Mi escenario principal pasa por mantener la tendencia alcista principal dominante. De momento, los niveles clave no se han roto y podríamos estar ante una corrección más o menos seria, pero no ante el inicio de un mercado bajista prolongado. Las caídas en los precios, aunque significativas, pueden estar reflejando un ajuste necesario tras un período de revalorización insostenible", añade.
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