El Fondo de Inversión en Pensiones del Gobierno de Japón (GPIF, por sus siglas en inglés) ha sido destronado como el mayor fondo de ahorro para la jubilación del mundo, después que la depreciación del yen haya erosionado el valor de sus activos en términos de dólares.
El fondo registró una ganancia récord en los tres meses hasta marzo, generando un rendimiento del 9,5%, pero la caída del yen a su nivel más bajo en 38 años frente al dólar fue lo suficientemente profunda como para poner el valor de sus activos por debajo del fondo de riqueza de Noruega en términos de dólares.
Los activos totales del GPIF alcanzaron los 245,98 billones de yenes (1,53 billones de dólares) a finales de marzo, según informó en Tokio el viernes. Esto se compara con el fondo de 17.719 billones de coronas noruegas (1,677 billones de dólares) de Noruega.
Las inversiones del GPIF en acciones japonesas obtuvieron un rendimiento del 18,2% durante el trimestre, mientras que los bonos nacionales incurrieron en una pérdida del 0,6%.
Las inversiones en el extranjero ganaron un 15,8% en acciones y un 5,4% en bonos, ya que el dólar se apreció un 7,3% frente al yen. El fondo registró un rendimiento récord de 45,4 billones de yenes para el año fiscal total.
Durante los primeros tres meses de este año, el índice MSCI All-Country World de acciones globales ganó aproximadamente un 7,8% y el índice S&P 500 subió un 10%, mientras que el índice Nikkei 225 de Japón saltó un 21% a un máximo histórico. Sin embargo, en términos de dólares, el rendimiento del índice japonés de primera clase fue del 12%.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro de EEUU a 10 años subieron 32 puntos básicos, mientras que los rendimientos de los bonos del gobierno japonés a 10 años aumentaron alrededor de 11 puntos básicos.
El yen ha caído más del 12% frente al dólar este año, siendo el peor desempeño entre las principales monedas, ya que la gran diferencia entre las tasas de interés en Japón y EE.UU. mantuvo la presión sobre la moneda.
Masataka Miyazono, presidente del GPIF, cuyo mandato finaliza en marzo, ha visto aumentar el valor de los activos del fondo en más del 50% desde que asumió el cargo en abril de 2020, reemplazando a Norihiro Takahashi. Bajo su gestión, el fondo ha impulsado mejoras en el gobierno corporativo, la expansión de inversiones activas y el uso de derivados para reducir el riesgo en valores extranjeros.
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