Maremoto en el mercado del petróleo. La incapacidad de los países productores de la OPEP y de socios como Rusia o China de ponerse de acuerdo en el nivel de aumento de la producción que aplicarán a partir del mes que viene ha disparado el precio del petróleo a niveles que no tocaba desde hace siete años. Así ha sido para el crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI), que supera esta mañana los 76,58 dólares. El petróleo Brent, el crudo de referencia en Europa, cotiza ya en máximos de casi tres años en el entorno de 77,34 dólares.
En lo que va de año su precio acumula un rally de más del 49%, que es incluso superior en el caso del crudo norteamericano (del 57,8%). La OPEP+ ha aplazado 'sine die' su reunión, que inicialmente se produjo el jueves y que amplió hasta este lunes para tratar de alcanzar un pacto que finalmente no ha llegado. Al parecer, Emiratos Árabes bloqueó el viernes la posibilidad de un acuerdo al pretender elevar su cuota de producción más allá de lo que le hubiera permitido la propuesta que en principio estaban dispuestas a sacar adelante la mayoría de las naciones exportadoras.
El grupo había tratado de aumentar la oferta en 400.000 barriles por día entre agosto y diciembre y había propuesto extender la duración de los recortes hasta finales de 2022. El año pasado, para hacer frente al desplome de la demanda en plena pandemia de Covid, la OPEP+ acordó reducir la producción en casi 10 millones de barriles por día desde mayo de 2020 hasta finales de abril de 2022.
El problema de este aumento del precio del petróleo es que coincide con un momento de debilidad, aún, de algunas economías -como las europeas- que no han terminado de dejar del todo atrás el bache económico provocado por la pandemia de coronavirus. De hecho, la zona euro volvió a entrar en recesión después de sufrir una contracción del PIB del 0,6% entre enero y marzo, tras la caída del 0,7% del último trimestre de 2020.
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