Pocos son los que pueden pagar un coche de manera instantánea. Lo más habitual es solicita run préstamos o contar con financiación por parte del concesionario o nuestra entidad bancaria para poder afrontar el gasto de adquirir un coche nuevo que, siendo sinceros y dependiendo del modelo y la modalidad de compra (segunda mano o nuevo), no es nada barato.
Los bancos, habitualmente, no ponen problemas a la hora de otorgar préstamos para comprar un nuevo vehículo, aunque siempre es necesario preguntar y pasar por el examen del departamento de riesgos. Los concesionarios y algunas marcas, habitualmente, también ofrecen servicios de financiación, con o sin entrada, bajo un interés. Y, por último, siempre se puede recurrir a entidades prestatarias como Cetelem, aunque siempre hay que mirar con lupa las condiciones del préstamo.
Una vez que ya tenemos el dinero en mano y podemos empezar a disfrutar de nuestro nuevo automóvil, pasan los días y no nos acordamos cuántos plazos del préstamos nos quedan para que el coche sea, por fin, nuestro. ¿Cómo sé cuánto me queda por pagar del préstamo?
Pues todo dependerá de quién nos lo haya concedido. Si ha sido el banco, los más fácil es entrar en nuestra área personal y consultar las amortizaciones, aunque también se puede acudir a nuestra oficina de confianza. Si el préstamo lo hemos solicitado a una entidad prestataria al estilo de Cetelem o Cofidis, se puede consultar el estado del préstamo por teléfono o bien entrando en la zona de usuarios de la página web de cada empresa.
En el caso de que haya sido el concesionario quien haya financiado la adquisición del coche, en el contrato que se haya firmado aparecerán los plazos de pago y la duración de la financiación, con la fecha en la que deberá amortizarse el último plazo.
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