El uso del móvil se mantiene como una de las distracciones que más accidentes de tráfico provocan

Los resultados de la última campaña de vigilancia de la DGT ya han salido a la luz y confirman una tendencia preocupante entre los conductores españoles. El uso del teléfono móvil durante la conducción sigue siendo una de las principales causas de siniestralidad vial, a pesar del endurecimiento de las sanciones y de las campañas de concienciación. 

Durante la semana del 16 al 22 de septiembre, la Dirección General de Tráfico en coordinación con los agentes de la Guardia Civil organizó una campaña especial de vigilancia para detectar distracciones al volante. De las 6.840 denuncias que se formularon, un 43% (2.930) estuvieron motivadas por el uso del teléfono móvil. Esta infracción, hasta ahora considerada grave, se sancionaba con la pérdida de 3 puntos en el carné de conducir y 200 euros de multa. 

Cambios en las sanciones

Sin embargo, en cuanto el Senado de su visto bueno y tras su correspondiente publicación en el BOE, estas sanciones van a endurecerse. Con las nuevas modificaciones introducidas en la Ley de Tráfico, el uso del teléfono móvil pasará a estar castigado con la pérdida de 6 puntos del carné. 

¿Pueden multarme por conducir con el codo apoyado en la ventanilla?

Además, como novedad, se estipula que el mero hecho de sujetar este dispositivo (o cualquier otro) en la mano pasará a considerarse una infracción, también penada con multa y pérdida de 200 euros. La justificación para introducir esta modificación es que llevar cualquier objeto o dispositivo que impida llevar las dos manos sobre el volante y reaccionar con la rapidez capacidad necesaria ante posibles imprevistos se considera una distracción.

Conducir mientras se contestan llamadas, se consulta el correo o se mandan mensajes a través del móvil obliga a desviar la mirada de la carretera mientras el coche sigue recorriendo metros sin la atención del conductor. La DGT calcula que a 120 kilómetros por hora, marcar un número de teléfono significa recorrer 466 metros a ciegas y, mandar un mensaje, 600 metros.