El aceite es uno de los líquidos que contribuyen a un funcionamiento mucho más fluido de las piezas del motor. Sus funciones son lubricar estos elementos para que funcionen sin roces, prevenir su degaste por el uso y permitirles entregar un mayor rendimiento. Por estas tres razones, asegurarse de que el aceite del coche está siempre en los niveles obligatorios, revisar su estado y cambiarlo cuando sea necesario son tres acciones que forman parte del mantenimiento preventivo del vehículo.
Aunque el primer impulso sea llevar nuestro coche de manera regular al taller para que lleven a cabo esta revisión, es mucho más económico que aprendamos a hacerlo nosotros mismos, ya que así podremos revisar el nivel del aceite siempre que lo consideremos necesario o sospechemos de que el volumen de este líquido no es correcto.
Para llevar acabo esta medición, que es muy sencilla, desde Mapfre explican los siguientes pasos.
- Antes de medir el nivel del aceite el coche ha de estar en posición horizontal, no en un terreno inclinado. El motor debe estar apagado y en frío.
- Hay que coger la varilla de medición (normalmente está dentro del capó). Todas las varillas tienen dos muescas, una con el límite mínimo de aceite y otra con el máximo.
- Introducimos la varilla en el depósito del aceite, la extraemos y la limpiamos con un trapo ya que esta primera medición no es válida.
- Procedemos a hacer la medición correcta y mientras sacamos la varilla habrá que limpiar lo justo para que el aceite no gotee. Cuando la hemos extraído por completo, habrá que asegurarse de que la marca del nivel del aceite está entre las dos muescas de la varilla.
Aprovechando esta medición podremos comprobar igualmente el estado del aceite. Cuanto más usado está, más oscuro será su color, por lo que en el caso de detectar que el aceite presenta un color muy negro, lo recomendable será sustituirlo sobre todo si nos acercamos al periodo de mantenimiento que especifique el fabricante. Si el aspecto del aceite es como de una pasta marrón, puede ser que haya una fuga en el motor y que este líquido se esté mezclando con el refrigerante, por lo que habrá que ir cuanto antes al taller.
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