Porsche inaugura su primer Charging Lounge; con puntos de recarga de 300 kW, sala VIP y exclusivo para sus clientes

Siguiendo el ejemplo que ha llevado a Tesla a tener una de las redes más extensas y mejor valoradas de cargadores eléctricos del mercado, Porsche tiene previsto instalar sus propias instalaciones de carga rápida a lo largo de las rutas más importantes de Europa, eso sí, dando un paso más en materia de lujo y con la experiencia de carga Premium que se espera de la marca. Así, el primer Porsche Carging Lounge se ha inaugurado a las afueras de Bingen am Rhein, en Alemania, y servirá como centro piloto, ofreciendo seis puntos de carga rápida de corriente continua y 300 kW, así como cuatro de corriente alterna y 22 kW.

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Estos Porsche Charging Lounges se situarán cerca de vías con mucho tráfico, estarán abiertos 24 horas al día, 7 días a la semana, y contarán con un alto rendimiento de carga. Además, el ambiente será confortable y lujoso, con una cómoda facturación centralizada y perfectamente adaptados a las necesidades de los conductores de Porsche en viajes largos. Estos puntos son específicos para clientes de Porsche, y podrán dar servicio a todos los modelos eléctricos e híbridos enchufables de la marca, gracias a potentes cargadores. Actualmente la potencia máxima de carga es de 300 kW, pero se podrá incrementar para alcanzar una velocidad de carga aún mayor, con principios del año que viene como fecha para subir hasta los 400 kW. Asimismo, la electricidad suministrada procede de fuentes renovables certificadas.

‘’Porsche ha definido una ambiciosa estrategia en materia de electrificación. Para 2030 queremos que más del 80% de los coches que entreguemos sean totalmente eléctricos. Este importante proyecto requiere una red de carga rápida densa y de alto rendimiento’’, comentaba Oliver Blume, Presidente del Consejo de Dirección de Porsche AG.

Lujo, confort y exclusividad

En cuanto a las salas en sí mismas, el diseño de estas estaciones de carga rápida evidencia el espíritu Premium y de lujo de la marca. El centro piloto de Bingen constituye un anticipo de cómo podría ser la imagen que tendrán en el futuro. El salón está acristalado de suelo a techo, los colores vivos y la madera clara dan lugar a un ambiente que favorece la sensación de bienestar, y el esbelto techo flotante que cubre los puntos de carga, conecta el exterior con el edificio de una manera armoniosa y diferencial.

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Además, la primera estación Porsche Charging Lounge del mundo se climatiza mediante una bomba de calor que funciona sin combustibles fósiles, mientras que parte de la electricidad necesaria la suministra el sistema fotovoltaico de células solares que se encuentra en la cubierta superior. Por si esto fuera poco, la gestión digital del edificio optimiza el consumo de energía, atenuando automáticamente la iluminación cuando no hay invitados, por ejemplo.

Para garantizar que el tiempo de espera entre recargas sea agradable, la sala tiene modernas instalaciones sanitarias en la zona del salón, así como una amplia sección de refrescos y aperitivos. Se puede pagar con trarjeta, así como con Apple Pay o Google Pay. También tiene disponibles contenidos analógicos y digitales, y una red WiFi de alto rendimiento.

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Estas estaciones Porsche Charging Lounge están integradas en Porsche Charging Service, por lo que aparecen directamente en el navegador de los coches. Porsche se encarga de centralizar la facturación, y gracias a ello, el precio de carga de 33 céntimos por kilovatio hora es tan bajo como el de otras estaciones de carga rápida de la red Porsche. Para acceder a las instalaciones y a la zona de la sala es necesario disponer de una identificación Porsche. Este ID debe estar vinculado al coche y, si la matrícula está almacenada en el Porsche ID, la barrera se abrirá automáticamente al reconocerla. De manera alternativa, el cliente puede utilizar su Porsche Charging Card o un código QR de la app MyPorsche para acceder tanto al recinto como a la sala VIP.