España cuenta con un sinfín de kilómetros de carreteras que nos muestran algunos de los lugares más espectaculares y maravillosos del territorio ibérico. En este caso, hablaremos del litoral asturiano, concretamente entre las brañas del interior y las corrientes del Cantábrico. En este lugar, los turistas más curiosos pueden presenciar un Paisaje Protegido en toda la Costa Occidental Asturiana, que cuenta con más de 30 kilómetros de longitud y donde se podrá presenciar las playas más inéditas y los acantilados más salvajes de nuestro país.
¿Dónde nos lleva esta carretera?
La carretera que nos lleva en volandas hasta este increíble lugar es la N-632, la cual traza la frontera al sur de la reserva y guía al ciudadano hacia la costa oeste del Principado de Asturias. En Cudillero, podemos encontrar el Monumento Natural de la Turbera de las Dueñas y nos establece el límite en la parte oriental, mientras que la Reserva Natural Parcial de Barayo lo hace en el occidental. Curiosamente, este bonito pueblo de 1.600 habitantes aproximadamente, es la puerta de entrada costera a esta 'maravilla del mundo', y podrás disfrutar, además, de sus monumentos más significativos, como pueden ser la plaza de La Marina o el anfiteatro de casitas blancas.
¿Existen más acantilados en el norte de España?
En el interior del litoral asturiano también es 'obligatorio' realizar una parada en el Cabo Vidio, muy próximo a Oviñana. Este lugar cuenta con acantilados feroces de 90 metros de altura y posee un tradicional faro, que fue creado en 1950, para guiar a todos y cada uno de los navegantes de la zona. Asimismo, desde el balcón más elevado del Paisaje podremos observar toda la costa occidental.
¿Cuál es la playa más especial de la zona?
En esta zona costera nos podemos encontrar con la playa del Silencio, una de los lugares con más encanto y menos ruidosos del territorio, haciendo honor a su propio nombre. Además, está acompañada de grandes precipicios verticales de más de 500 metros de largo y protegido por un sinfín de matorrales y tapizados de pino que hacen la experiencia al viajero aún más enriquecedora.
¿Hay más monumentos en la zona?
En la Punta del Cuerno, exactamente a 80 metros de altitud, nos podemos encontrar con la ermita de la Virgen de la Riégala, que se construyó en 1983. Desde el mirador de esta zona, además de estar repleta de eucaliptos y bosques de pinos, podremos presenciar y disfrutar de la playa de Cadavedo, la ensenada de la Riberiona y Los Cabos de Vidio y Busto.
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