Otras señales de tráfico como los dientes de dragón que te obligarán a reducir la velocidad

La DGT empezó a implementar el año pasado nuevas señales horizontales de tráfico con el objetivo de obligar a los conductores a reducir la velocidad. 
Imagen de los 'dientes de dragón'.
Imagen de los 'dientes de dragón'.
MINISTERIO DE TRANSPORTES
Imagen de los 'dientes de dragón'.

No son estrictamente nuevas, ya que la DGT comenzó a implementar su uso en pruebas el pasado 2021, pero este verano se están dejando ver algo más a lo largo de la red viaria de nuestro país. Los llamados 'dientes de dragón' son unas señales horizontales de tráfico, es decir, pintadas a lo largo de la carretera, que tienen como objetivo reducir la velocidad de circulación. 

Reciben su nombre por su forma: dos filas de triángulos a lo largo de los límites del carril, creando la sensación de encontrarse dentro de una dentadura. Se colocan en las entradas a los poblados, marcando el límite entre la carretera y la entrada en un casco urbano. Es en esta zona en la que el conductor debe empezar a reducir la velocidad para adecuarla a los límites establecidos dentro del municipio por el que va a circular. 

La DGT considera que los dientes de dragón crean una sensación óptica de estrechez en la carretera que, unida al factor de que esta es una nueva señal que puede generar sospecha en el conductor, lo anima a ir reduciendo la velocidad. Esta es una más de las nuevas herramientas que está poniendo en funcionamiento la DGT con este objetivo. 

Señales de la DGT para que reduzcas la velocidad

Otro sistema también relativamente novedoso son las líneas quebradas. El RACE explica que son unas líneas pintadas de forma regular en un tramo de 30 metros, como zigzag, y su función es anunciar al conductor que se aproxima a un paso de cebra para que reduzca la velocidad. 

Estas nuevas señales viales se unen a los dispositivos de reducción de velocidad ya existentes en nuestras carreteras, como son las bandas sonoras. Las bandas sonoras son unos resaltos que se colocan a la entrada de los poblados por los que transcurre una carretera y que producen un ruido cuando el coche pasa por encima de ellas, avisando al conductor de que debe reducir la velocidad. 

Los semáforos intermitentes que pueden pasar al rojo si detectan que el coche circula a una velocidad por encima de la permitida también un sistema utilizado en la entrada de algunos pueblos, así como las pantallas que nos indican la velocidad a la que conducimos antes de entrar a la localidad, avisándonos de si está por encima del límite o si es la adecuada.

Obviamente, además de estas señales, Tráfico utiliza otros métodos para controlar la velocidad en carretera y 'animar' a los que conductores levanten el pie del acelerador, como los radares, fijos y móviles, y otros dispositivos como los helicópteros y los drones.

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