En los últimos años el método 'curly' cada vez se está instaurando más en España. Sin embargo, sigue habiendo muchas mujeres que para facilitar el peinado de su cabello o porque simplemente huyen de las ondas o rizos apuestan por alisarse el cabello.
Una práctica, la del alisado del cabello, que si se hace mucho más de la cuenta y sin utilizar herramientas adecuadas y de buena calidad pueden dejar nuestro pelo frágil, quebradizo y sin vida. Así que surge la gran pregunta: ¿con qué frecuencia podemos utilizar la plancha o el secador para lucir una melena lisa y brillante?
Frecuencia ideal para alisar el cabello sin dañarlo
Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de alisarnos el cabello es que influye mucho el estado en el que se encuentra y también qué tipo es, es decir, a un cabello fino o dañado le convienen menos alisados que uno grueso o saludable.
Además, del tipo y la salud del cabello hay que tener en cuenta si tiene un color natural o teñido. Sin embargo, teniendo en cuenta todas estas cosas: "una recomendación general sería alisarse el pelo un máximo de dos veces por semana. Exceder esta frecuencia puede llevar a un daño acumulativo, debilitando el cabello y provocando puntas abiertas, sequedad y roturas", nos indican los expertos de productos para el cabello de Alfaparf Milano.
Fundamental el uso de productos de calidad
Diferentes estudios sobre las españolas que se alisan el pelo, indican que éstas prefieren el uso de las planchas al secador y cepillo. Pues bien, independientemente de la técnica que se elija es fundamental que los aparatos sean de muy buena calidad. Planchas con placas de cerámica o titanio, que distribuyen el calor de manera uniforme, ya que reduce el riesgo de daño en el cabello y se logran resultados más efectivos.
Asimismo, siempre que se vaya a utilizar un aparato para alisar el cabello hay que utilizar "un producto protector del calor porque estos productos crean una barrera entre el cabello y el calor, minimizando el daño y ayudando a mantener la hidratación natural del cabello. Es un paso crucial para proteger la salud capilar", indican desde Alfaparf Milano.
La clave también está en la temperatura
Otro de los factores importantes a la hora de alisarte el cabello y dañarlo menos de lo necesario es la temperatura a la que pones la plancha o secador. Siempre es mejor empezar con pocos grados y aumentarlos si es necesario. Además, hay que evitar pasar dos veces la plancha por la misma parte del cabello.
Los expertos de Alfaparf Milano añaden: "Es muy importante ajustar la temperatura de la plancha según el tipo de cabello y su estado para evitar daños innecesarios". Estas serían las pautas para utilizar la temperatura óptima:
1. Cabello fino o dañado. Temperaturas más bajas, entre 120°C y 150°C.
2. Cabello normal: Temperaturas moderadas, entre 150°C y 180°C.
3. Cabello grueso o rizado: Temperaturas más altas, entre 180°C y 230°C.
Aunque no hay una norma establecida para la frecuencia con la que debes alisarte el pelo, sí que se recomienda que no se exceda de los dos días a la semana. Pero antes de ponerse manos a la obra con la plancha hay que tener muy claro el tipo de pelo que tenemos y su estado.
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