¿Qué se aplica primero la crema antiedad o la ampolla flash? Este es el orden correcto

Una buena rutina de cuidado facial no solo implica saber elegir los productos dermocosméticos adecuados dependiendo de nuestro tipo de piel. También hay que tener en cuenta cuál es el orden correcto a la hora de aplicar, por poner un ejemplo, la crema antiedad o la ampolla flash. Y es que, sin lugar a dudas, se tratan de dos básicos que, normalmente, se suelen aplicar en la rutina de cuidado matutina con el objetivo de aportar un extra de luminosidad y jugosidad al rostro para una piel más suave, lisa y uniforme. Y es que con el paso natural de los años disminuye la producción de colágeno, lo que hace que la piel se vea envejecida, con arrugas, líneas de expresión, así como flacidez y descolgamiento. 

Lo cierto es que los propósitos de estos dos productos es mantener la piel hidratada y prevenir los signos propios del paso de la edad. Sin embargo, hay matices a tener en cuenta a la hora de tener que aplicarlos. En primer lugar, la ampolla flash es una fórmula antifatiga con acción inmediata que actúa para devolver a todo tipo de pieles su buen aspecto, elasticidad y firmeza, esto es lo que se conoce como "efecto buena cara". 

Ayuda así a eliminar los signos de estrés y fatiga localizados en el rostro y sirve para preparar la piel de cara a conseguir un maquillaje más duradero, capaz de aguantar todo el día. En el caso de la crema antiarrugas, actúa como un tratamiento reafirmante intensivo que, a diferencia de las ampollas, se caracteriza por una textura rica y nutritiva.

Qué se pone primero: ¿crema hidratante o protector solar? Este es el orden correcto

¿Qué va primero, la ampolla o la crema?

Un truco perfecto para acertar con el orden correcto de aplicación de los productos dermocosméticos es utilizar la regla de menos denso a más espeso. En cualquier caso, cabe recordar que los tratamientos a aplicar deben ser sobre el rostro limpio y seco, por lo que se recomienda seguir una previa limpieza facial. En este sentido cabe recordar que la loción siempre después del tónico facial. 

El tónico perfecciona la limpieza y el desmaquillado del rostro, arrastrando los restos de maquillaje que no se hayan eliminado, mientras que la loción prepara la piel para que asimile de forma óptima todo el tratamiento que vas a aplicar a continuación. Es el turno de la ampolla, con una alta concentración de ingredientes activos de pequeño tamaño molecular, lo que permite que pueda penetrar hasta las capas más profundas de la piel. De hecho, los principios activos están aún más concentrados que en el caso del serum, por lo que la ampolla sería el primer paso. 

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A continuación, el serum debería ir antes de la crema. Así estará más jugosa y receptiva para la crema antiarrugas. Siguiendo la regla de menos denso a más espeso, cremas, geles y emulsiones son más densos y pueden incluir aceites, por lo que será siempre después de todos los cuidados anteriores. En cualquier caso, se recomienda dejar entre 30 segundos y un par de minutos entre el serum para permitir que se absorba bien.

El protector solar siempre al final

Con la radiación solar, la piel se deshidrata con mucha facilidad y por eso es importante mantenerla nutrida. La Dra. Maite Fernández Morano, miembro del Grupo de Dermatología Estética y Terapéutica (GEDET) explica a Mujer.es que "la crema hidratante se aplica antes que la crema de protección solar, para que el protector solar haga su función de proteger la piel de los rayos ultravioleta". Además, añade: "otra opción es usar una crema hidratante o base de maquillaje con índice de protección solar" y mezclar ambas.