Boticaria García revela algunos consejos para evitar la sensación de tener las piernas cansadas. Lejos de su faceta de nutricionista en la que da recomendaciones sobre diferentes alimentos, la experta ha querido ir más allá y resolver uno de los problemas más comunes de las mujeres, especialmente cuando se van cumpliendo años.
Hinchazón en los tobillos o zonas próximas, hormigueo, cansancio o presión. Estos son solo algunos de los síntomas más comunes de las piernas cansadas. Se trata de una afección que puede llegar a dificultar el día a día y que tiene un impacto directo en la calidad de vida.
¿A qué se debe la pesadez en las piernas? Esa sensación se debe, principalmente, a un problema de retorno venoso para que la sangre fluya con total normalidad. Con la edad o con los cambios hormonales, esta afección se va volviendo más compleja y suele ser muy habitual en las personas que no realizan ejercicio o deporte habitual. Además, las mujeres son más propensas a sufrir de piernas cansadas.
Cuando las venas están sanas tienen las paredes firmes y poseen, según explica Boticaria García en su blog, unas "pequeñas válvulas que impulsan la sangre impidiendo que se estanque y retroceda". Sin embargo, el problema se encuentra cuando "la pared interna de las venas se deteriora". En este caso, las válvulas "no impulsan correctamente la sangre y esta puede estancarse dando lugar a un ensanchamiento". Esto es lo que provoca unos síntomas que son molestos y que van empeorando con el tiempo.
Los consejos de Boticaria García para las piernas cansadas
Existen varios factores de riesgo que no se pueden modificar para evitar tener las piernas cansadas. Por ejemplo, la genética es una de las más importantes porque la predisposición a sufrir esta dolencia se puede heredar. También influye el ir cumpliendo años y ser mujer.
No obstante, Boticaria García dice que sí que hay otros frente a los que se puede actuar. Estos hábitos están relacionados con el estilo de vida: mover el cuerpo, controlar el peso y otros mucho más concretos. Hay que tener presente que todas las personas pueden sufrir de piernas cansadas, pero los que su trabajo sea estar de pie o sentado tiene un riesgo extra de sufrir un problema venoso.
Esto quiere decir que, por ejemplo, profesionales sanitarias que tienen que estar mucho tiempo de pie, camareras y dependientas, son algunas de los que pueden padecer esta afección. En este sentido, Boticaria García ha dado una serie de consejos y recomendaciones para cambiar algunos hábitos diarios.
Lo primero de todo: hacer ejercicio de forma regular. García afirma que esto puede ayudar a "mejorar la circulación y tonificar los músculos de las piernas". Además, pone ejemplos: "Subir escaleras, pedalear, nadar o hacer ejercicios específicos (como caminar de puntillas o hacer giros con los tobillos) pueden ser útil".
El uso de las medias de compresión también está incluido en la lista de la experta. "Aunque para algunas personas conseguir ponérselas puede ser peor que una tortura china, se trata de una herramienta eficaz para disminuir la presión venosa y mejorar el dolor y el edema", explica Boticaria García.
Se tendrá evitar el uso de ropa ajustada que pueda "oprimir el flujo sanguíneo y agravar el riesgo de insuficiencia venosa". Por otro lado, señala que si cuando se quita la ropa se ven marcas en la piel, algo que ocurre normalmente con los vaqueros, habrá que replantarse si se está utilizando la ropa adecuada.
Otro de los puntos a tener en cuenta es mantener un peso saludable. Esto se debe, según cuenta Boticaria García, a que un "exceso de peso puede debilitar o bloquear las válvulas de las piernas". Evitar tóxicos como el café o el tabaco, suprimir (cuando sea posible) los tacones altos, refrescar las piernas, elevarlas y no cruzarlas o romper con el sedentarismo, son otros de los consejos que da la experta.
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