Toni Acosta dijo una vez en una entrevista: "los sueños no se cumplen, como los años. Los sueños se madrugan, se trabajan, se estudian y a lo mejor, algún día, ese sueño se hace realidad, pero no se cumple". Me gusta muchísimo y comparto la reflexión absolutamente.
Ya hemos hablado por aquí del peligro de las frases motivacionales del “si quieres puedes” y la cantidad de frustraciones que generan.
La semana que viene quiero hablar de todo esto con mujeres que han trabajado sus sueños y que han tenido éxito en sus diferentes carreras. También quiero hablar con ellas de talento y de si el talento también se trabaja o sencillamente se tiene.
Yo tengo mi opinión al respecto y pienso que el talento se tiene y se perfecciona. Pienso también que una persona sin talento puede llegar a hacer bien aquello en lo que no es talentoso, pero le costará muchísimo esfuerzo y el resultado será correcto. Una persona con cualidades para el deporte, la música, la oratoria, el dibujo… a poco que se lo trabaje lo hará mejor que el primero y acabará menos cansado.
La gente sin talento y que hace bien las cosas tiene mucho mérito. La gente con talento y que hace (solo) bien las cosas tiene que trabajar más.
A veces nos cuesta detectar el talento propio, el ajeno se ve antes. Quiero saber si Nuria Roca, Marta Hazas, Lydia Valentín, Boticaria García o Ana Fernández-Villaverde (la Bienquerida) lo detectaron, conocían de lo que eran capaces. Quiero saber cómo han trabajado sus sueños. Voy a tener la oportunidad de estar con todas en una charla el próximo miércoles en el teatro Capitol a las 20:00. Volveré para contarles cómo han vivido su éxito, su talento y sus sueños.
La gente sin talento y que hace bien las cosas tiene mucho mérito. La gente con talento y que hace (solo) bien las cosas tiene que trabajar más
Y hablando de sueños, también hay una frase relativa a ellos que siempre me pone los pelos de punta: "Ten cuidado con lo que sueñas porque puede hacerse realidad".
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