¿Fitness en el embarazo? Los mejores consejos y precauciones

Muchas mujeres en España dudan al hacer ejercicio durante el embarazo, sin embargo, es aconsejable que practiques deporte siempre teniendo en cuenta ciertas pautas para realizarlo de forma segura.
Mujer embarazada haciendo ejercicio
Mujer embarazada haciendo ejercicio
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Mujer embarazada haciendo ejercicio

El ejercicio físico regular durante el embarazo está especialmente recomendado, ya que ayuda a mejorar la salud al mismo tiempo que reduce el riesgo de incrementar mucho de peso y también facilita la posibilidad de tener un parto sin complicaciones al aportar la fuerza y resistencia necesaria para lograrlo.

Hay que tener en cuenta una serie de consejos y precauciones para la práctica del fitness en el embarazo, para que se pueda practicar de una forma segura y para que así sea posible disfrutar de los múltiples beneficios que tiene sobre el estado de salud de la mujer gestante, entre los cuales nos encontramos la reducción de molestas digestivas, reducción del insomnio, la depresión y la ansiedad, la mejora de la tensión arterial, el incremento de la elasticidad de las articulaciones o la reducción del riesgo de sufrir diabetes gestacional, entre otros.

Los mejores consejos y precauciones para practicar fitness en el embarazo

A la hora de practicar fitness en el embarazo hay que ser consciente de que no todos los deportes son apropiados. Aquellas mujeres que ya practicasen algún deporte antes del embarazo podrán, en muchos de los casos, seguir haciéndolo, pero con menos intensidad, y siempre tras haber consultado con el médico si existe alguna contraindicación.

En cualquier caso, aquellas embarazadas que no estén acostumbradas a realizar ejercicio, deben buscar un deporte o actividad que les permita ejercitarse de forma cómoda y que las permita practicarlo gradualmente. Entre los deportes más recomendados, a priori, se encuentran caminar, la natación y el aquaerobic, aunque hasta el 5-6 mes de embarazo también puedes disfrutar del ciclismo. A partir de ese momento se podría apostar por una bicicleta estática, ya que la razón de parar de andar en bicicleta tiene que ver con la posibilidad de sufrir una caída.

Por otro lado, también está especialmente recomendada la práctica de yoga o pilates, ya que, aunque no son ejercicios cardiovasculares, ayudan a aumentar la fuerza y la flexibilidad, aunque deben practicarse de forma limitada, puesto que todos los ejercicios no son posibles.

Más allá de elegir ejercicios de fitness adecuados, es necesario que se tengan en cuenta una serie de consejos y precauciones, destacando especialmente las siguientes:

  • Ejercicio con intensidad moderada: al practicar fitness durante el embarazado se debe buscar el ejercicio con una intensidad moderada. Para poder tener siempre el control acerca de ello, lo mejor es usar un pulsómetro. La intensidad del ejercicio no debería superar el 70% del volumen máximo de oxígeno de la gestante.
  • Evitar algunos deportes: por otro lado, existen diferentes deportes que deben ser evitados por completo en el caso de estar embarazada, este es el caso de los deportes de contacto y aquellos que se desarrollan sobre superficies duras que incrementan la presión abdominal, como sucede con el voleibol, el baloncesto o el fútbol, entre otros.
  • Equipamiento adecuado: aunque este consejo debe ser aplicado por cualquier persona, aunque no esté embarazada, conviene recordar que para practicar fitness durante el embarazo es fundamental llevar la ropa y el calzado adecuado para poder practicarlos con comodidad y de forma segura.
  • Fitness seguro: el ejercicio físico debe ser desarrollado de forma segura, lo que implica comenzar por calentar bien los músculos con ejercicios de estiramiento para evitar posibles lesiones, así como controlar adecuadamente la alimentación y realizar las pausas que resulten necesarias durante la sesión de entrenamiento para descansar e hidratarse. De igual modo, durante el segundo y tercer trimestre de embarazado, se recomienda no realizar ejercicios tumbada sobre la espalda, ya que en ese caso se reduce el flujo sanguíneo del útero.
  • Trabaja la flexibilidad: la flexibilidad es fundamental para cualquier embarazada, por lo que se debería trabajar, siempre que sea posible, a diario.

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