Si hay algo en lo que coinciden todos los dermatólogos es que la mejor crema antiedad es, sin lugar a dudas, el protector solar. Además de las quemaduras y del daño celular, la radiación ultravioleta tiene efectos a medio y largo plazo sobre la piel. Por eso, es importante que utilices el fotoprotector de forma continua todo el año y no únicamente en los meses de verano. Y es que, aunque no veamos una quemadura en invierno, los efectos de los rayos ultravioleta (UVA y UVB), la luz visible y los infrarrojos nos afectan a diario.
Tras el efecto de bronceado que perseguimos intencionadamente cuando tomamos el sol, se esconde una serie de peligros que pueden acelerar el envejecimiento de nuestra piel o debilitar nuestro cabello. La piel tiene memoria y con el paso de los años pueden aparecer arrugas prematuras, manchas o flacidez. El reto, por tanto, es apostar por una fotoprotección que nos permita disfrutar de los beneficios del sol evitando sus riesgos.
Aquí es justamente cuando entra en juego Clarel, la marca especialista en belleza, cuidado personal y bienestar, que desde sus comienzos ha puesto al alcance de cualquier persona fotoprotectores de alta calidad. Como policías del sol, defienden que este tipo de artículos no deberían ser bienes de lujo y prueba de ello es su colección exclusiva de bonté.
La línea de bonté incluye una amplia selección de solares que protegen nuestra piel, nuestro cabello e, incluso, nuestros labios de los efectos nocivos del sol, garantizando que luzcan siempre sanos y bonitos. La mayoría de sus productos son water resistant y, lo que es más importante aún, Ocean Respect. Cada año los océanos se quedan con más de 25.000 toneladas de residuos de cremas contaminantes y los productos de bonté no dañan la biodiversidad marina y es responsable con su ecosistema.
Protectores solares para cuidar la piel
La crema facial anti-edad de bonté (8,99 euros) con protector SPF50+ es uno de sus productos estrella. Previene el envejecimiento prematuro de la piel y favorece su regeneración, reduciendo las manchas y el enrojecimiento. Gracias a su fórmula enriquecida con vitamina E y ácido hialurónico, este fotoprotector también actúa como antioxidante e hidratante. De este modo, mejora la flexibilidad y la elasticidad de la piel, así como su luminosidad y firmeza, atenuando las arrugas.
Además, su textura no grasa y su fórmula de rápida absorción facilitará su aplicación. No tendrás que preocuparte de la posible aparición de granitos ni tampoco de que el producto se diluya en la piscina o en la playa, ya que es resistente al agua.
La gama de bonté también contempla el cuidado de la piel después de la exposición solar. Precisamente, el aftersun luminoso (6,99 euros) ha sido una de sus novedades este año.
Testada dermatológicamente para todo tipo de pieles, esta loción ligera y de rápida absorción hidrata, nutre y regenera sin dejar esa sensación pegajosa. Enriquecida con extracto de remolacha, penetra en las capas más profundas de la piel y deja un acabado suave y luminoso para brillar en las noches de verano. Su resultado es tan espectacular que la utilizarás cada día y no solo cuando sufras una quemadura.
Es muy difícil encontrar un protector labial con SPF50+ y Clarel lo tiene. Para conseguir una protección completa, te recomendamos el protector labial de bonté (2,99 euros). Apto para pieles sensibles y complementado con un delicado aroma a miel, este bálsamo cuenta con una acción hidratante y nutritiva que aporta confort y brillo a los labios dañados por el sol.
Elaborado con una combinación de filtros solares de amplio espectro y enriquecido con manteca de karité, aceite de oliva y aceite de almendras, previene de forma natural la sequedad y devuelve la elasticidad a los labios, protegiéndolos a su vez de los efectos adversos del clima y la contaminación para que se mantengan suaves y bien cuidados.
El pelo también sufre con el sol
Y ahora que hemos protegido cada centímetro de nuestra piel con protectores solares SPF50 y Ocean Respect que velan por el medio ambiente, llega el momento de prestar la misma atención a nuestro cabello.
El cabello, como la piel, es vulnerable a los rayos ultravioleta, haciéndolo más susceptible a la rotura y a las puntas abiertas. Por eso, si quieres evitar las tijeras en septiembre, es necesario que nuestra melena también esté a salvo con productos específicos para ello. El protector capilar de bonté (4,99 euros) es un artículo que, además de proteger el cabello de la exposición solar, también lo hace de la sal y el cloro.
Formulado con activos reparadores e hidratantes, como la glicerina vegetal y la vitamina B5, siempre lucirás un pelo suave y brillante. Capaz de proteger la fibra capilar a diario, siendo respetuoso con el cuero cabelludo y sin dejar sensación grasa, este spray fortalece y previene el daño del cabello a la vez que lo hidrata y lo nutre.
Aunque el sol acaba pasando factura a nuestra piel y a nuestro cabello, siempre es posible mantenerlos sanos y protegidos con los productos adecuados. Gracias a los avances de los laboratorios dermatológicos y cosméticos, se puede frenar la aparición de manchas y arrugas en la dermis, así como la deshidratación o la rotura de las fibras capilares.
Con la gama solar de bonté, puedes conseguir el resultado que deseas. Sus productos están disponibles en las cerca de 1.000 tiendas de Clarel y en Clarel.es y este verano puedes conseguir de regalo una bolsa de playa y un pareo/toalla con la compra de dos artículos de bonté solar. ¡Brilla como nunca en vacaciones!
- REALIZADO POR ALAYANS STUDIO
Este contenido ha sido elaborado por ALAYANS STUDIO, unidad Branded Content de Henneo.
