![Mentoras y equipo](https://imagenes.20minutos.es/files/image_640_360/files/fp/uploads/imagenes/2024/01/31/mentoras-y-equipo.r_d.712-696-5000.jpeg)
Una vez escuché una palabra que hacía referencia al sesgo por el cual los hombres promocionan a otros hombres dentro de las empresas. Soy incapaz de recordarla ahora, pero lo triste es que no encuentro ninguna que defina algún "favoritismo" por el que las mujeres tendamos a promocionar a otras mujeres a cargos de responsabilidad, quizá porque no sea lo frecuente. Cierto que el número de mujeres en la alta dirección o en los consejos aumenta con timidez, pero seguimos en desventaja.
Con independencia de las cifras, las mujeres necesitamos el acompañamiento de otras mujeres que cuiden de nuestro talento y lo pongan en la pista de despegue para que se convierta en un liderazgo de referencia. ¿Tú has contado con alguna mentora? ¿Qué has aprendido de ella? ¿Cuál es el mejor consejo que te ha dado? Esa persona que nos ayuda en el trabajo materializa esa tan aludida sororidad, que debe de actuar también en el ámbito profesional.
Me gusta escuchar discursos de mujeres cuando agradecen los apoyos en su carrera; en ellos se cuelan unos padres con mucha fe en sus hijas, una pareja que, lejos de competir, se convierte en aliada y un equipo que co-crea con ellas los logros… más raro es mencionar el agradecimiento a una mujer de la que se aprendió mucho, quizá porque no existió. La mentora, más que un cargo que facilita a otro el progreso en una empresa, es toda mujer que refuerza a quien, por ejemplo, quiere emprender un negocio, por humilde que parezca, y comparte su particular viaje e incluso le ofrece proyectos para abordar conjuntamente. Mentora es quien dice "te voy a presentar a… que seguro te puede ayudar", porque esa vieja leyenda de que las mujeres somos más competitivas entre nosotras está superada. Nos gusta trabajar juntas y animar a otras a sumarse.
![Mujeres mentoras y equipo](https://imagenes.20minutos.es/files/image_640_auto/uploads/imagenes/2024/01/31/mujeres-mentoras-y-equipo.jpeg)
Me encuentro en México y compruebo a diario cómo las mujeres abrimos puertas a otras, a las que apenas acabamos de conocer, movidas por una fuerza invisible que facilita el avance de todas. Siento la necesidad de rendirles un homenaje en este viaje donde no dejo de aprender. Mentora es Laura Ruíz, referencia en el ámbito educativo mexicano a través de sus diferentes responsabilidades en TEC Monterrey, que un día creó un programa para becar a estudiantes de entornos desfavorecidos llamado "Líderes del Mañana", cuyo impacto ha transformado la vida de muchos jóvenes. Laura podría dedicarse a escribir sus memorias y viajar, sin embargo su necesidad de dejar una huella en la sociedad a través de la educación es tan poderosa que sigue ideando proyectos uno tras otro.
Ha cuidado de mí en Monterrey, ha abierto puertas y me ha enseñado a que, cuando alguien cree de verdad en su propósito, no hay un final solo etapas, así que me quedan muchas por cumplir en la misión de despertar la curiosidad para que las personas alcancen vidas más plenas. Marta Martín dejó España para descubrir mundo. En México echó raíces, formó una familia y se forjó como una profesional brillante que en este momento necesita seguir explorando; por ello ha creado su propia consultoría, experta en sostenibilidad. Ella es una gran conectora de personas, gran aportación de las mentoras que ofrecen su agenda a las mujeres que necesitan que otras conozcan su trabajo. Marta abre tantas puertas que su casa carece de ellas, tanta es su hospitalidad.
Laura, Marta, Cecilia, Fernanda, Mónica… mentoras en un país nuevo para mí que gustosas comparten su experiencia y su talento sin escatimarlo, convencidas de que la vida no admite compartimentos estancos: lo mismo aprendemos de la gestión de una dificultad laboral como de la superación de una ruptura de pareja. Lo mismo co-creamos en una mesa de despacho que en una sobremesa, entre café y margaritas. Las mujeres llevamos en el ADN la curiosidad y la empatía hacia las demás, y nuestro gran logro pasa por incorporar estas fortalezas a nuestro liderazgo. Solo necesitamos que las más jóvenes se sientan orgullosas de ello.
Ojalá, cada vez que desees un fin profesional, encuentres en tu camino a una mujer que lo facilite, te motive, te inspire, te potencie, te muestre las herramientas para sacar lo mejor de ti. Una mentora de vida que haga brillar aún más la tuya
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