Camilla Parker-Bowles se viste de Cardo en la coronación de Carlos III en Escocia

Camilla Parker-Bowles en la coronación de Carlos III en Escocia

Han pasado casi dos meses de que Carlos III se convirtiera de forma oficial en el rey de Inglaterra, en una ceremonia multitudinaria celebrada en diferentes localizaciones de Londres. A ella acudieron representantes de todos los países, entre los que se encontraban los reyes de España y, según la prensa internacional, Letizia fue la mejor vestida.

Sin embargo, esto no ha terminado y este miércoles 5 de julio Carlos III ha asistido a su segunda coronación, esta vez en Escocia, al igual que hizo la reina Isabel II hace 70 años. Allí han sido presentados los llamados Honores, las joyas de la corona escocesa que llevaban los antiguos reyes hasta que todo el territorio fue anexionado por la corona inglesa.

Esta ceremonia es menos ostentosa y magnificente que la primera. En esta ocasión, no acudieron las monarquías internacionales, sino que será una coronación más íntima, con la familia como invitados. Cumpliendo con la puntualidad británica que les caracteriza, la celebración comenzó a las 13.15 h (hora local) con una procesión militar de los representantes de todos los estamentos de la vida y cultura escocesa, que salieron desde el Castillo de Edimburgo hasta la Catedral de St. Giles, donde tuvo lugar la ceremonia religiosa de la coronación.

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Tras una hora de recorrido, finalmente llegaron al emplazamiento, donde pudimos ver por fin al rey y reina de Inglaterra, además de los duques de Gales, Kate Middleton y el príncipe William, aunque esta vez sin sus tres hijos pequeños.

Un conjunto lleno de tradición y respeto

El 6 de mayo, Camilla Parker-Bowles acompañó a su marido con una larga túnica completamente personalizada con sus iniciales y flores favoritas en hilo de oro y confeccionada en exclusiva para ella por Ede & Ravenscroft, los sastres más antiguos de Londres. Ya dentro de la Catedral de Westminster reveló el verdadero look: un vestido blanco impoluto acompañado con una chaqueta con cola, ambos con detalles dorados con los que parecía una novia. Este conjunto fue creado por Bruce Oldfield, el diseñador de cabecera de Lady Di y que ahora confecciona los trajes y vestidos para Camilla.

Esta ocasión no iba a ser diferente, pues Camilla ha acudido a la coronación en Escocia con una capa de terciopelo verde y azul con un blasón de oro, el uniforme solemne de la Orden del Cardo. En el centro se encuentra una medalla de San Andrés, el patrón de la orden, que estableció el rey Jaime I en 1714. Acompañó a la pieza con un sombrero de terciopelo negro, similar a una boina, grande, con plumas blancas de garza, terminando de completar el uniforme.

Sin embargo, la pieza principal se escondía debajo: un vestido banco con vuelo que podría pasar por un look nupcial. Que la corona escoja este tono para una coronación no es casualidad, ya que simboliza la verdad y la pureza, dos de las cualidades que más se buscan en un gobernante.

Aunque no se ve muy bien bajo la capa, podemos apreciar que se trata de un vestido largo a capas muy pequeñas, de manga larga y acompañado de unos guantes a tono. Como accesorios, ha llevado una cartera de mano con asa blanca y unos zapatos de tacón beige, terminando por completar un estilismo tan elegante como el que llevó en Londres.