Desde que el pasado enero se operase por sorpresa a Kate Middleton, los rumores sobre su real estado de salud no han hecho más que crecer. El Palacio de Kensington y su departamento de prensa de la futura reina de Inglaterra han mantenido un enorme secretismo que solo ha aumentado las habladurías y las escasas fotos de la princesa de Gales, en las que no se le ve la cara o, directamente, están retocadas, han llevado a cuestionar la credibilidad de los Windsor incluso en la prensa británica más conservadora.
La polémica foto de Middleton con sus hijos por el Día de la Madre en la que el 'photoshop' se convirtió en el protagonista, ha hecho que los medios se pregunten qué está pasando de verdad en la familia real, convirtiéndose en la comidilla de los programas de cotilleo de todo el mundo y avivando aún más las teorías conspiranoicas sobre la desaparición desde el 17 de enero de la princesa.
Que solo se haya anunciado que Kate Middleton pasó por una cirugía abdominal y que no tenía nada que ver con un cáncer, ha hecho que se especule con una histerectomía, que tiene la enfermedad de Crohn o que por las complicaciones que hubo tras la cirugía haya caído en coma o que incluso hubiera muerto en la operación.
Por otra parte, las teorías más locas apuntan que la princesa de Gales va a ser reemplazada por un doble que le están preparando y que las fotos que han salido de ella hasta ahora (en la que va en coche con su madre y junto al príncipe Guillermo con la cara girada) no son ella. Sin embargo, Angela Levin, la biógrafa oficial del príncipe Harry y la reina Camilla apunta que Kate Middleton podría estar pasando por los mismos problemas de salud mental que padeció Lady Di en su día.
Levin señala que cuando Diana tuvo sus crisis, Guillermo tuvo que cuidar a su madre con sus problemas de salud mental, lloros y gritos, convirtiéndose en "el hombre de la casa", tal y como lo llamó la misma princesa de Gales. Sin embargo, ahora él es adulto y sabe que su prioridad es cuidar de su mujer.
Este paralelismo de Kate Middleton con Diana nos lleva hasta el 25 de diciembre, su última aparición pública y donde llevó un accesorio que podría confirmar esta teoría de la biógrafa.
Cuando Lady Di fue princesa, hubo especulaciones y reportes que afirmaban que lidiaba con problemas de salud mental, como la depresión y la ansiedad, debido a las presiones que tenía sobre su posición en la realeza británica, su complicado matrimonio con el entonces Príncipe Carlos y la intensa atención que tenían sobre ella de los medios de comunicación. Las mismas presiones que Middleton tiene ahora sobre sus hombros.
Si nos fijamos en su look de la pasada Navidad, vemos que la princesa de Gales lleva los pendientes favoritos de su suegra, de zafiros con diamantes, además de llevar un 'total look' del color predilecto de Diana, lo que sugiere que podría sentirse muy unida a ella por las similitudes que han tenido sus vidas y los problemas por los que ambas han pasado.
No obstante, hasta que no haya confirmación directa por parte de la familia real o sus representantes, todo son elucubraciones, aunque en temas de salud mental, los Windsor siempre han sido completamente herméticos.
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