Los 'salseos' de los 'celebrities' han marcado las décadas. Especialmente si hablamos de los años 90, son muchas las parejas las que podemos recordar (y que ojalá todas se hubieran mantenido hasta hoy). Entre las más míticas está la de Gwyneth Paltrow y Brad Pitt. Los actores comenzaron su relación en 1994 y estuvieron juntos hasta 1997.
Ambos se conocieron cuando trabajaron juntos en el 'thriller' de David Fincher, Seven (que se estrenó en 1995). Por aquel entonces, Brad Pitt tenía 31 años, y Paltrow tenía 22 y, tal y como la propia actriz ha confesado en distintas ocasiones, se trató de un "amor a segunda vista", ya que en un inicio el posible tonteo entre los dos se confundió con amistad. No tardaría en surgir la pasión, y fue entonces cuando los actores se convirtieron en un prototipo de pareja ideal a nivel mundial pero, ¿qué es lo que sucedió para que rompiesen?
Brad Pitt, al ser más mayor que ella, quiso dar un paso más allá en su relación y le propuso matrimonio. La idea no solo es que no convenciera a Paltrow, sino que le asustó y, por tanto, tuvo clara la respuesta.
En uno de los últimos vídeos compartidos por Goop, la marca de estilo de vida moderno de Gwyneth Paltrow (donde la actriz puso a la venta una vela con olor a su vagina), la intérprete ha enseñado su vestidor.
En su interior guarda piezas icónicas de moda, como unos 'Manolos' rosas que se puso cuando ganó el Oscar por Shakespeare in Love en 1999, entre otros zapatos que confiesa guardar para su hija, Apple. El mítico vestido rosa de los Oscar de 2015; un diseño blanco que llevó durante su noviazgo con Brad Pitt o incluso el diseño con el que el actor le pidió matrimonio en los 90, que es el que más llama la atención por su significado.
Se trata de un diseño que la actriz llevaba durante unas vacaciones en Italia que estaba disfrutando con Pitt y que nunca le habíamos visto puesto. "Este es el vestido que llevaba cuando Brad me propuso matrimonio, en realidad", explica. Se trata de un vestido blanco con estampado floral multicolor con cuello de volantes y cierre de botonadura en la parte delantera.
Otro de los vestidos que guarda con mucho cariño por Brad Pitt es un vestido camisero de manga larga y corte recto, de color blanco, con botones en el centro, que pertenece a Calvin Klein y que llevó durante su noviazgo con el actor de Hollywood.
GALERÍA | Los vestidos de la venganza más recordados
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