Después de siete años, tres hijos y cuatro perros, Sara Sálamo e Isco dieron hace unos días el 'sí quiero' en una ceremonia muy privada e íntima, tan íntima que, hasta hoy, había sido todo un secreto. La actriz, como no podía ser de otra manera, ha apostado por dos vestidos de marca española, aunque el verdadero detalle especial se encontraba en sus zapatos.
No es novedad que Sálamo se decante por un calzado cómodo, ya la hemos visto en más de una ocasión con deportivas sobre la alfombra roja y su boda no iba a ser diferente, como cuando se saltó el protocolo estos últimos premios Goya llevando unas Converse blancas con un vestido de tul amarillo de Delirio Habanero.
La pareja se había prometido a finales del año pasado y, desde entonces, no habíamos tenido ninguna noticia hasta hoy. La relación comenzó con un mensaje en redes sociales que él escribió cuando se vieron por primera vez en una discoteca, siendo amor a primera vista.
El secreto lo mantuvieron durante un tiempo, tradición que, al parecer, han seguido con su boda al sorprendernos a todos anunciando que, desde hace días, ya son marido y mujer desde sus cuentas de Instagram en un bonito 'post' compartido, como ahora hacen las parejas de moda.
La novia ha llevado dos vestidos de Rosa Clará. El primero de diseño minimalista de corte imperio y tirantes, en un blanco puro con falta en 'A'. El segundo, para el banquete, es algo más elaborado, plisado, con escote palabra de honor, 'cut-out' bajo el pecho y un fular al cuello.
No obstante, en ambos looks llevaba los mismos zapatos, unas Converse blancas muy parecidas a las que llevó en los Goya. Isco ha seguido su ejemplo, con unas deportivas a juego y muletas por una lesión.
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